Comboni, en este día

En una carta a Elisabetta Girelli (1870) desde Verona se lee:
Estamos unidos en el Sacratísimo Corazón de Jesús en la tierra, para luego unirnos en el cielo eternamente. Es menester recorrer a paso largo los caminos de Dios y de la santidad, para no detenerse más que en el paraíso.

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Nº Escrito
Destinatario
Señal (*)
Remitente
Fecha
441
Madre Emilie Julien
0
Roma
27. 4.1872
N. 441 (412) - A LA MADRE EMILIE JULIEN

ASSGM, Afrique Centrale Dossier



W.J.M.J.

Roma, 27 de abril de 1872



Mi querídima y venerable Señora:



[2958]
¡Qué contento estoy de haber recibido su carta y de saber que pronto llegará a Roma! Fui a anunciárselo a nuestro Padre, el Card. Barnabò, y me contestó: «¿Y eres tan ingenuo como para creer que la Madre General vendrá pronto a Roma? Yo sólo lo creeré cuando la vea aquí: las religiosas no dicen siempre la verdad, y los curas tampoco decís siempre la verdad». Pero yo le respondí que usted vendrá a Roma en la primera quincena de mayo.

Le ruego que traiga consigo el magnífico Informe de la Congregación que Sor Catalina leyó el lunes pasado al Card. Barnabò, porque deseo tomar nota de todas las Casas y de sus progresos para publicarlo en Alemania y en Francia. En Alemania desde 1869 ha sido publicado mi Informe sobre la Congregación, y en Roma se lo enseñará Sor Catalina.


[2959]
No puede venir a Roma en una circunstancia mejor que la presente, porque a mediados de mayo los Cardenales de Propaganda celebran una Congregación especial para mí, para confiarme el más extenso Vicariato de Africa y del mundo. Los Prelados de Propaganda están bien dispuestos hacia mí, pero yo no puedo organizar una gran Misión sin las Hermanas. Por tanto espero que me conceda usted todas las Hermanas orientales que tiene en Marsella. En el Kordofán he comprado una gran casa árabe con un espacioso jardín, y la he pagado en parte. Es la primera vez en la historia que se ha alzado la Cruz en el Kordofán, que se ha celebrado allí la santa Misa y que las Hermanas van a ir a aquellos lugares para difundir el Evangelio. La ciudad de El-Obeid tiene 64.000 paganos y 40.000 musulmanes. Me escriben que si hubiese allí dos de nuestras negras de El Cairo, podrían hacer un bien inmenso.

¿Qué bien no harán entonces siete u ocho Hermanas de San José con las Hermanas orientales? Yo creo que harán milagros. Venga a Roma y hablaremos largamente; pero venga en la primera mitad de mayo, es necesario. Espero que esté aquí la próxima semana.


[2960]
Por lo que respecta a mi deuda con el Sr. Lorenzo, también hablaremos en Roma. Yo estaré encantado si usted cree en conciencia que el pago de todo puedo hacérselo a usted, espero que dentro de poco.

¿Y Sor María Bertholon? Hace tiempo que no me escribe desde Ste. Afrique. Las negras la quieren mucho, y no sería mala idea destinarla a una de nuestras casas de Africa Central.

Presente mis respetos a la Madre Asistente, esa excelente mujer del Evangelio. ¡Puede estar usted orgullosa de su Congregación!

Salude de mi parte a Sor Genoveva. Le aseguro que su nombre no se borrará nunca en El Cairo, por lo mucho que hizo. Fue la que inauguró la misión de caridad de la mujer católica en la capital de Egipto, y ella sola trabajaba por diez. Debido a esto, todavía se sigue hablando bien de ella en El Cairo y se hablará siempre, porque hizo un gran bien.


[2961]
Aquí en Roma tiene usted una estrella de caridad, de talento y de habilidad en la persona de Sor Catalina. Le anticipo que se va a poner muy contenta con ella, porque en medio de tantas dificultades sabe desenvolverse con la prudencia y soltura de una persona de Dios cargada de experiencia. Los cardenales, los nobles, las princesas, los enemigos y los amigos del Papa, todos la tienen en gran admiración y estima. Es una verdadera hija de San José, y una de las hijas de usted que más se le parecen. La ha formado según su corazón, y ella ha resultado muy buena alumna. Todas las otras Hermanas son muy buenas y pías y sin más voluntad que la de las Superioras. Tiene usted en Roma una comunidad modelo.


[2962]
Destíneme a mí su negra. En el Kordofán la casaremos, si ella quiere, con un reyezuelo negro.

Hablaremos respecto a educar otras Hermanas árabes y en cuanto a las calificaciones que se deben dar. Pero, mientras, destíneme todas las que tiene en Marsella y que han terminado el Noviciado.

Para escribir a Colonia, hágalo a:

Monsieur Jaimes Müller

Sécrétaire des Vereines de

Heiliger Grabes

à St. Ursule

COLOGNE (Prusse Rhenane)

Esa es la dirección.

El es el Interventor y el factótum de la Sociedad. Todo depende de él.

He recibido cien francos que usted me ha enviado de parte de la señora Villeneuve.

Le escribiré a ella dentro de poco. Ruegue por este su devoto hijo



Daniel



Original francés.

Traducción del italiano






442
Señora A. H. De Villeneuve
0
Roma
15. 5.1872
N. 442 (413) - A MADAME A. H. DE VILLENEUVE

AFV, Versailles



J.M.J.

Roma, Piazza del Gesù, 47

15 de mayo de 1872



Mi muy querida y venerable Señora:



[2963]
El próximo martes habrá una Congregación General de los Cardenales en el Vaticano relacionada conmigo y con mi Obra; por lo cual le suplico que rece mucho por mí y por mi causa, a fin de que el Espíritu Santo inspire lo mejor para los pobres negros.

Le doy gracias infinitas por los cien francos que me ha enviado mediante la Madre General. Dios la bendecirá por su admirable piedad. En mi insignificancia, yo nunca dejo de rezar por usted, Augusto, Désiré, su esposo y María. Varias veces he pedido la bendición del Papa para usted, Augusto y María. El se encuentra tan bien que nunca ha estado tan fuerte y robusto.


[2964]
La Madre Emilie se halla aquí desde el sábado, y está bien. Ella y Sor Catalina le mandan un atento saludo. Siempre hablamos de usted, y decimos lo que nos agradaría que estuvieran aquí la Sra. de Villeneuve y el Sr. Augusto.

Como me encuentro muy ocupado a causa de mi Congregación cardenalicia, no puedo escribirle más; pero lo haré después, con los resultados y otras cosas.

Presente mis afectuosos respetos a mi querido Augusto y a la Sra. María. Tenga siempre la mirada puesta en el cielo, para el que estamos hechos, y que la Santísima Virgen la guarde siempre a usted y a su casa. Mientras, tengo la suerte de declararme en los Corazones de Jesús y de María



Su devotmo. servidor

Daniel Comboni



Original francés.

Traducción del italiano






443
Mons. Luis de Canossa
0
Roma
15. 5.1872
N. 443 (414) - A MONS. LUIS DE CANOSSA

ACR, A, c. 14/92



J.M.J.

Roma, 15 de mayo de 1872



Excelencia:



[2965]
Mil gracias por su muy apreciadísima carta del 12 del corriente. Con la ayuda de Dios me encuentro perfectamente, y ambos podemos peregrinar a Subiaco, visitar la Cueva de San Benito y pasar dos días con el negro D. Pío. Este es un ángel, y aunque ahora no va bien de salud, cuando vuelva a su tierra, el Kordofán, se recobrará, por ser de excelente constitución. El Papa y Barnabò consintieron en que fuese ordenado sacerdote en cuanto yo decidiese su admisión definitiva. Y ahora que V. E. se ha dignado dar su venerado permiso, en quince días nuestro muy pío D. Pío, tan estimado por el Papa y por muchos, será sacerdote y quedará a nuestra disposición. He visto en Subiaco trabajos suyos verdaderamente admirables. Es una buena adquisición.


[2966]
En cuanto al egipcio de Génova, del que V. E. me escribe, y del que recibí carta, sospecho que su fuego por la misión es un pretexto para volver a su país a nuestra costa. Por eso he escrito al Superior de aquel Instituto de Artesanos para que me dé, en conciencia, un exacto informe sobre el peticionario; y también he escrito a D. Bosco, a Turín, adonde fue conducido por Olivieri, para que me suministre las oportunas referencias, indicándome el motivo por el que dejó al Instituto Bosco para ir al de los Artesanos de Génova. Por las respuestas sabremos a qué atenernos, y no me dejaré liar por nadie que intente quitarse problemas largándoselos a los demás.


[2967]
La vista de nuestra Ponencia tendrá lugar en Congregación General en el Vaticano el próximo 21 del corriente. El viernes pasado llegó respuesta, favorable en sustancia, de Mons. Ciurcia, el cual hizo grandes elogios de misioneros, negras, monjas e Institutos; pero advirtió que había exageraciones en el Informe dado a la Propagación de la Fe de Lyón e impreso en los Anales de enero de 1872. Enseguida se imprimió esa carta, y el sábado fue distribuida entre todos los Cardenales la Ponencia, de la que es Ponente el Emmo. Monje La Valletta. Sería utilísimo que V. E. escribiese un par de líneas a este Emmo. Cardenal al Palacio Altempo, para recomendarle nuestro asunto, diciéndole que espera que el Insto. de Verona dé hombres excelentes de la categoría de Rossi, etc., y que en Verona hay gran interés por Africa, etc. Un Canónigo de Trani me asegura que el Arzobispo de allí tiene preparado otro óptimo colaborador, no inferior a Fiore, para entregármelo a mi paso por Trani. De lo cual me di cuenta por una carta que me escribió hace poco aquel Arzobispo.


[2968]
Don Pío será ordenado titulo Missionis. Leí su carta del 12 al Card. Barnabó, en la que V. E. lo cumplimenta y me ordena besarle la mano. Me respondió pidiéndome que le salude cordialmente. Pero en cuanto a besarle la mano, dice que no quiere, para que V. E. no incurra en excomunión, habiendo pagado Su Eminencia desde 1856 dieciséis escudos por un Breve de S. S. Pío IX en que fulmina la excomunión a quien besa la mano a Barnabò. A D. Perinelli, que siempre le quiere besar la mano, le dice invariablemente: «No, porque hay excomunión». Insistiendo yo hace tiempo para que se tratasen con más rapidez en Propaganda nuestros asuntos, yo decía: «Por amor de Dios, démonos prisa, porque los negros andan perdidos mientras esperan que vayan a socorrerlos». A lo que Su Eminencia me contestó: «Si han esperado cuatro mil años, todavía pueden esperar unos meses».

Pagaré a Befani por La Voce. Me gustaría mucho que viniera el Rector del Seminario. Le saludan nuestra Madre General, que ahora está en Roma (fundó 28 Instos, en Europa, Asia, Africa y Australia); el Marqués Baviera; Mons. Mannetti, Administrador en Subiaco; el Emmo. de Silvestri; el Barón Visconti, D. Perinelli, y su indigno hijo



Dan. Comboni



Ayer vi al Papa, y está bien: no haga caso del telégrafo español.






444
Mons. Luis de Canossa
0
Roma
17. 5.1872
N. 444 (415) - A MONS. LUIS DE CANOSSA

ACR, A, c. 14/93



J.M.J.

Roma, 17 de mayo de 1872



Excelencia Rma.:



[2969]
¡Cuánto lamento que haya caído enfermo nuestro querido, venerado e incomparable Sr. Rector! Ya había hecho yo mis planes para ir juntos a ver al Rmo. P. General de los Jesuitas... y conducir nosotros mismos a Verona... Pero roguemos insistentemente al Señor que nos conserve a este hombre providencial. El lunes pediré para el Sr. Rector una bendición especial de nuestro Santo Padre. Vemos a menudo a Su Santidad, y hace días me pidió que saludase a V. E. Anteayer mandé a D. Perinelli a pedir al Papa que le diese la Comunión con sus santísimas manos, y, en efecto, ayer por la mañana tuvo la gran dicha de comulgar de las mismas manos de S. S. en su capilla del Vaticano.


[2970]
Le doy las gracias por las bellísimas estampas de la novena, una de las cuales hice llegar enseguida a manos del Santo Padre. Han gustado mucho en Roma, y, habiéndoseme acabado, precisamente deseaba comprar más. Y he aquí que la bondad de V. E. me ofrece la ocasión: por lo tanto me alegraría de que ordenase enviarme al menos cien, al precio establecido. Di la Reminiscencia a Giacobini y a muchos; pero tengo ejemplares todavía. Giacobini y otros a los que se la di son justamente los que presiden la Sociedad para la Santificación de las Fiestas, que ha hecho un gran bien en Roma. A algunos del Corso que habían abierto en la Fiesta, distinguidas familias romanas les invitaron a presentarles sus cuentas, con la idea de dejar de comprarles para siempre. Entonces los infractores se pusieron a rogar a sus clientes, prometiéndoles cerrar. Todo fue inútil: los transgresores pagaron su culpa. Es un espectáculo la conducta de los romanos, y sobre todo de la juventud católica. De palabra le contaré muchas cosas.


[2971]
Los días se me hacen largos hasta el martes que viene. Pero el Señor es bueno, y estoy contentísimo: los Cardenales tienen sumo interés por la Obra, bendicen el coraje y el celo de V. E., y dicen cosas que para su humildad sería embarazoso oír. Pero somos marionetas de Dios: por tanto, sólo a El el honor.


[2972]
Me ha conmovido saber que esas más de cien personas, almas elegidas, han ofrecido su vida por la conservación del Papa. El lunes se lo contaré al Santo Padre, que se pondrá contento. En Roma, a nadie le importa ni el Parlamento, ni el Gobierno, ni el Rey: en Roma sólo reina Pío IX. Es una gran satisfacción saber la piedad de nuestros buenos veroneses: seiscientas comuniones en la Scala, quinientas en los Colombinos. Casi diría que nuestro clero no va a la zaga de ninguno. ¡Gloria a Dios y a Verona! Como le escribí, he buscado y hecho buscar por toda Roma el libro de Santo Tomas sobre los Evangelios traducido por Tommaseo, sin haberlo podido encontrar. Suspendo ya la búsqueda.


[2973]
En cuanto a esas buenas almas de Lonato que escriben diciendo que D. Comboni acosa con continuas propuestas a Cerebotani, ruego a Dios que las bendiga. Hace más de dos meses que no he visto ni hablado a D. Cerebotani, ni oído hablar de él. En todo el tiempo que llevo en Roma lo vi tres veces. En la primera me manifestó estar descontento con su situación, añadiendo que su inclinación es la de dedicarse al ministerio y a la salvación de las almas. Entonces, como hago con todos, le dije: «Venga a Africa». «Hace tiempo –me respondió– que tengo esa intención, pero en cierto modo me lo impiden circunstancias familiares». Esto fue la primera vez. La segunda vino con D. Peloso, al que dije en broma señalando a Cerebotani: «Ahí tenemos un futuro misionero de Africa», y lo comentamos y nos reímos juntos. La tercera vez, ya no se habló de ello. Esta es la verdad, que V. E. puede decir y hacer leer a esas buenas gentes de Lonato, las cuales pueden a su vez ponerse en comunicación con D. Cerebotani en Roma, el cual corroborará la verdad de mi afirmación. La única recomendación que le hice es que se encomiende a Dios, consulte consigo mismo y con su confesor, y pida consejo a algún sabio personaje; y en caso de que en él persista el deseo de las misiones, que escriba a V. E., poniéndose totalmente en sus manos y dejándose guiar.


[2974]
Y que si V. E. tiene a bien aprobar su vocación, la Misión, omnibus absolutis, podrá dejarle la limosna de la Misa para su familia y para contribuir a pagar las deudas familiares. A lo que Cerobotani contestó: «Eso no estaría mal. Porque si continúo en Roma como estoy, lo que cobro no basta para vivir, y no puedo ayudar a mi familia. Y si voy de párroco o de cura, tampoco podré ayudar a mi familia, porque o bien seré más pobre que ahora, o si recibiese un buen beneficio tendría que socorrer a los pobres. Otras ocupaciones fuera del ministerio no las quiero, pues me metí a sacerdote para dedicarme al sacerdocio. Así que me inclino por las misiones, y especialmente por la de nuestro Obispo, etc.» Me parece que razona bien, y que piensa más prudente y cristianamente que las buenas almas de Lonato, cuyas ideas tienen más que ver con la tierra que con el cielo. Esto es todo. Pero, por lo que observé, todavía no veo demasiado claro en cuanto a esta creída o pretendida vocación; por lo cual no he hablado ni hablaré más con Cerebotani, limitándome a responder a sus preguntas si me las hace.


[2975]
Mons. Ciurcia, en sustancia, escribió a Propaganda mostrándose un hombre muy sensato y consciente: señaló que es preciso mantener en su sitio y frenar al P. Carcereri, quien por otro lado posee óptimas cualidades. Así que Barnabò me dijo: «Voy a tener que ataros a los dos con veinticuatro cadenas, porque si las rompéis no habrá quien os sujete, y acabaréis los dos en el Cabo de Buena Esperanza», y se reía mucho. El martes haga un Memento por el éxito de la Ponencia. Presente mis respetos al Rector del Seminario, y dígale que se cuide, porque su vida es preciosa.

Reciba las filiales muestras de devoción de



Su indignmo. hijo

Daniel Comboni



Desearía el nombre, apellido y dirección de los que debo suscribir ad annum a la La Voce della Verità.






445
Mons. Luis de Canossa
0
Roma
23. 5.1872
N. 445 (416) - A MONS. LUIS DE CANOSSA

ACR, A, c. 14/94



J.M.J.

Roma, 23 de mayo de 1872



Excelencia Rma.:



[2976]
Hace media hora que un enviado de D. José Gru me trajo un sobre abierto con su veneradísima del 19 del corriente. Corrí enseguida a ver a Adami, y no sabe nada sobre el abogado Morani; me dirigiré al P. Boero para obtener noticias, y le apremiaré. En cuanto a la petición del Corpus, cayó de las nubes. Buscó entre sus papeles, y, encontrando la petición entre los documentos despachados, dijo que había recibido en Ritos una negativa. Pero, como sospeché que no la había presentado, y puesto que falta mucho para el Corpus, le insté a que la presentase de nuevo; y de hecho la presentará mañana. Hablaré del asunto a Mons. Bartolini, y en pocos días estará resuelto, espero.


[2977]
¡Qué apenado estoy por nuestro Rector! Estos días he hecho rezar a las Hermanas del Sdo. Corazón, de la Compasión, etc. por su restablecimiento; [he pedido la] Bendición del Papa, etc. Y como D. Losi no me escribe, espero buenas noticias.


[2978]
La Ponencia fue una de las más brillantes e interesantes, y agradó sumamente a los Cardenales. No sé lo que se decidió, porque es secreto hasta la resolución del Papa (el domingo por la tarde). Por lo que he podido entrever, ha ido magníficamente. Como los Cardenales decidieron imprimir mi Gran Mapa de Africa con la demarcación de las Misiones Católicas, en el que están trazados todos los Vicariatos, Prefecturas y Diócesis de Africa para que sirva a la Congregación, rogué a Sus Eminencias que me lo dejasen una semana para enriquecerlo y perfeccionarlo. Así que D. Perinelli y yo trabajamos todo el día y gran parte de la noche.


[2979]
Befani mandó una persona a preguntarme si la cantidad que yó pague era por un nuevo socio. Me trajo la carta que V. E. le escribió a él y, dándome cuenta del equívoco, hice que borrasen como socio al del 15 de junio, etc.

He hablado y mantenido correspondencia con Marietti y Pustet, etc. sobre Mons. Giuliari; pero veo que es necesario dirigirse también a Migne, de París. Marietti ha abandonado la Imprenta políglota; no llegó a un acuerdo con Propaganda. Le beso el sagrado anillo.



Su devotmo. hijo

Daniel Domboni






446
Mons. Luis de Canossa
0
Roma
25. 5.1872
N. 446 (417) - A MONS. LUIS DE CANOSSA



Sicut placuit D.no... Sit nomen D.ni bened.um

Roma, 25 de mayo de 1872



Excelencia Rma.:



[2980]
Alcemos los ojos al cielo y bendigamos al Señor. Es muy duro el golpe que supone para la Diócesis y para Africa la pérdida de D. Pedro Dorigotti, y V. E. comprobará lo duro que es sobre todo cuando tenga que nombrarle un sucesor. Pero confiemos en Dios. Yo siento toda la congoja que aflige el paternal corazón de V. E., y estoy consternado por la pérdida en sí y por el dolor que experimenta V. E. Rma. Pero el pensamiento de que el Señor le hace digno de llevar su Cruz y de tocarle donde le duele, el pensamiento de que Jesucristo mismo, María y San José le ayudan a llevar la cruz, y le ayudan eficazmente, me consuela.


[2981]
Qué gran misterio, Rmo. Monseñor y Padre mío: mueren los hombres más valiosos y necesarios. Pero Jesús, María y José no mueren nunca, y en ellos está nuestro apoyo. ¿Entonces? Pues es necesario recurrir siempre a quien ha hecho los granos de arena y las montañas. Sicut placuit D.no etc. factum est: Dominus dadit, D.nus abstulit, sit nomen D.ni benedictum.

Mañana por la tarde Mons. Simeoni referirá al Papa la Ponencia y el juicio y decisiones de la S. C., y dentro de cuatro días V. E. sabrá el resultado. En estos días no he podido averiguar con claridad qué han resuelto, y por eso no he hecho otra cosa que agitarme, pensar, reconcomerme de ansiedad, y grabarme en la mente y en el corazón la meditación del Fundamento y la indiferencia ignaciana.

Le beso reverente la mano, declarándome



De V. E. Rma.

hummo. y dev. hijo

Daniel Comboni






447
Can. Juan C. Mitterrutzner
0
Roma
27. 5.1872
N. 447 (418) - AL CANONIGO J. C. MITTERRUTZNER

ACR, A, c. 15/68



Roma, 27 de mayo de 1872



Charissime:



[2982]
La S. C. de Propaganda el 21 del corriente, y S. S. Pío IX el 26 (ayer) se han dignado confiar todo el Vicariato de Africa Central al Insto. de las Misiones para la Nigricia de Verona, y nombrar a D. Dan. Comboni Provicario Apostólico. Su Santidad ordenó anunciar oficialmente al General de Ara Caeli que ha aceptado su renuncia al Vicariato, y que esto ha sido comunicado al Insto. de Verona y a D. Comboni.

Con prisas, y prometiendo escribir ampliamente más tarde



Tuis. D. Comboni

Provicarius Ap.licus Africae Centralis



La S. C. escribirá a Viena dentro de pocos días.






448
Mons. Luis de Canossa
0
Roma
27. 5.1872
N. 448 (419) - A MONS. LUIS DE CANOSSA

ACR, A, c. 14/96



Roma, 27 de mayo de 1872



Excelencia Rma.:



[2983]
La S. C. de Propaganda, en la Congregación General del pasado día 21, y S. S. Pío IX el pdo. 26, se han dignado asignar todo el Vicariato de Africa Central, el más vasto del mundo, instituido por S. S. Gregorio XVI el 3 de abril de 1846, al Insto. de las Misiones para la Nigricia de Verona, y han nombrado Provicario Apostólico a mi pobre e indignísima persona.


[2984]
Al mismo tiempo, Su Santidad ha ordenado que se anuncie oficialmente tal noticia al General de los Franciscanos, aceptando su renuncia a dicho Vicariato, e invitándolo a establecer en El Cairo un Instituto de jóvenes franciscanos (en conformidad con nuestro Plan), con vistas a prepararlos para el apostolado de la Nigricia para la época en que esté en condiciones de aceptar alguna parte del gran Vicariato.

Finalmente, Su Santidad ha dispuesto que sea instituido un nuevo examen sobre las Reglas y Constituciones del Insto. de Verona.

Dentro de algunos días me entregarán todos los papeles y documentos para la asunción del gobierno de tan vasta Misión.


[2985]
Bien ve V. E. que la Santa Sede nos ha concedido más de lo que habíamos pedido. Nosotros pedimos una Misión en Africa Central: la S. S. nos ha concedido toda Africa Central erigida en Vicariato Apostólico. La Santa Sede tiene por costumbre pensar las cosas durante años y años antes de decretar sobre ellas. Habiendo yo insistido en una pronta decisión, decidió lo que acabo de manifestarle, tomándose un poco más de tiempo para completar sus resoluciones.

El dolor que siento por la pérdida del incomparable D. Dorigotti me hace insensible hic et nunc a este paso gigantesco de nuestra Obra. Pero los ojos al cielo. Le besa las manos



Su indignmo. hijo

Daniel Comboni

Provicario Aplico. de Africa Central






449
P. Marino Rodolfi
0
Roma
30. 5.1872
N. 449 (420) - AL P. MARINO RODOLFI

ANOB, Fald. 30, cart. 71/b



J.M.J. y Sta. Angela

Roma, 30 de mayo de 1872



Mi querido amigo:



[2986]
Su carta me encuentra en la cama, donde estoy con fiebre fría. Le agradezco sus afectuosos sentimientos. Es un hombre providencial: hubiera deseado escribir a Mons. el Obispo, al Rmo. Carminati, a las buenas señoritas Girelli y a los otros para notificarles el resultado de la Congregación General de Cardenales en el Vaticano del día 21, y de la determinación de S. S. Pío IX con respecto a mi Obra; pero me encuentro muy enfermo y le ruego que lo haga usted en mi lugar.


[2987]
Su Santidad y la Congr. General de Cardenales me han encomendado la misión más ardua, laboriosa y vasta de la tierra; es decir, toda Africa Central, teniendo como límites Trípoli, Egipto, Abisinia, los Gallas, Zanguebar, Guinea, y los 12° de lat. Sur. Así que tengo bajo mi jurisdicción in fieri más de ochenta millones de infieles que conducir a Cristo. El Vicariato de Africa Central, ha sido confiado a mi naciente Insto. de Verona, y yo he sido nombrado Provicario Apostólico mediante Decreto del 27 de mayo del corriente año. Aquí tiene al pobre curita nacido en Limone, encargado por la Santa Sede de una jurisdicción que es la más vasta y dificil del mundo. Cuando en el Vicariato de Africa Central haya un pequeño número de católicos, entonces la Santa Sede nombrará un Obispo. Pero yo, como Ordinario de Africa Central, tengo todas las facultades episcopales, menos la de conferir las Ordenes mayores.


[2988]
Le he dicho todo esto para que comprenda la necesidad de rezar y hacer que recen todas las almas devotas de Brescia a Santa Angela, a los Sagrados Corazones, etc.

El día 27, fiesta de San Felipe, celebré misa junto a la tumba del gran Apóstol de Roma.


[2989]
Presente mis respetos al Rmo. Carminati, y por mediación suya al ángel de Brescia, a quien escribiré para el Sdo. Corazón. Igualmente a todos sus sacerdotes y a la Madre Gesualda, Superiora del Sdo. Corazón. Haga una visita por mí a las muy queridas y dignas señoritas Girelli. Y salude de mi parte a todos los conocidos, especialmente al Dr. Pelizzari y a D. F. Faroni, Director de la Obra de la Prop. de la Fe en Brescia.


[2990]
Hágame el favor de decirme algo de las Chiappa, y si esas buenas almas del Prepósito de S. Faust. y Sta. Jovita y de su Rmo. Fiscal han cambiado de ideas. No puedo mantener abiertos los ojos, de la fiebre y el dolor de cabeza. Saludos a Capretti. En cuanto a Milessi, le ruego que hable con él en mi lugar y le proponga nuestra Misión. Hágalo usted, porque estoy mal, y curado tengo mil ocupaciones. Haré rezar al Papa con este objeto.

Tuissimus in Xto.



Dan. Comboni

Provicario Aplico. de Africa Central






450
Mgr. Agustín Planque
0
Roma
5.1872
N. 450 (421) - A MONS. AGUSTIN PLANQUE

ASMA, 30071, n. 11/100



J.M.J.

Roma, Piazza del Gesù 47/3 - 6º

Mayo de 1872



Mi muy querido y venerado Hermano:



[2991]
Me siento en el deber, por la amistad y el compartido interés por nuestra querida Africa, de anunciarle que el próximo martes 21 se celebrará una Congregación General por Africa en conjunto y especialmente por usted y por mí. Le comunico esto para que ruegue y haga rogar en su Seminario por el éxito tanto de su asunto como del mío. Espero que dentro de poco pueda establecerse entre los dos Vicariatos del Cabo de Buena Esperanza, y que más tarde nos sea posible encontrarnos en el centro.


[2992]
Le puedo confiar que aquí en Roma, en Propaganda, hay un clima muy favorable a usted: se lo merece bien, porque ha hecho mucho por Africa y se espera que lo seguirá haciendo hasta la muerte. Mande rezar también por mí y por mis pobres negros. En septiembre saldré de El Cairo hacia Jartum y el Kordofán con una gran caravana. Puede que parta en agosto.

Adiós. Reciba las expresiones de mi respetuoso afecto y estima.



Su devotmo. serv.

Daniel Comboni Misro. Aplico.



Original francés.

Traducción del italiano