[2376]
Me parece encontrar un poco de calma en el P. Estanislao; pero poca humildad, porque no admite haberse equivocado, y sostiene que hablaba de cosas a realizar con los años y en tiempos mejores, mientras que en todas sus cartas hablaba de cosas inmediatas, y especialmente en la cláusula 17 de su propuesto Contrato, donde dice:
«17.o Por último, este Contrato, tanto en lo relativo a las aportaciones como a la aplicación del mismo, empezará a tener efectividad definitiva a partir del próximo 1 de enero de 1871». El P. Estanislao estuvo cincuenta y dos días sin escribirme. Nada más llegar los nuevos misioneros, etc., me mandó una carta con fecha 8 del mes pasado, y luego otra el 18, que le incluyo. También la recibida ayer del Canónigo. Tanto éste como el P. Ravignani me han escrito maravillas del P. Estanislao y muy bien de Franceschini, y lo mismo el P. Pedro, el Párroco franciscano; lo cual es para mí un consuelo. Pero del P. Estanislao no he recibido la menor muestra de humildad, que es lo primero de todo. Aun así, yo siempre le escribí cada ocho días, menos dos veces.
[2377]
El escribió a Mons. el Obispo muy mal de mí, y también habló muy mal de mí a un alto personaje, diciendo que lo he calumniado y traicionado, que no se puede fiar de mí, y que no soy realista. Yo le perdono todo por lo mucho que ha hecho por la misión y por mí, etc., méritos que sólo empañan los efectos de su carácter irascible, etc. Resumiendo, diré con Ud. que el P. Estanislao es terrible, pero una grandísima persona; y por esto haremos esfuerzos por conservarlo, y esfuerzos sobrehumanos.
Reciba mis más atentos saludos. Yo mismo iré el domingo a recoger las cartas adjuntas.
D. Comboni