Somos una familia de sacerdotes y hermanos laicos, presentes en 36 naciones de cuatro continentes, África, América, Asia y Europa, que consagran sus vidas a la proclamación del Evangelio a todos los pueblos, viviendo codo con codo con los más necesitados, los descartados y marginados; promoviendo la dignidad de toda persona humana, la defensa de los derechos humanos, la promoción de la justicia social y ambiental, la paz y la reconciliación.
Formamos parte de la gran Familia Comboniana, compuesta por unos 3000 misioneros. Incluye nuestro Instituto, los Misioneros Combonianos del Corazón de Jesús (MCCJ), fundados en 1867 por San Daniel Comboni para la Evangelización de África Central; las Hermanas Misioneras Combonianas, un instituto de religiosas, fundadas por San Daniel Comboni en 1872, para el mismo apostolado; las Misioneras Seculares Combonianas, que se unieron a nosotros en la segunda mitad del siglo XX, y otros grupos de laicos, entre ellos los Laicos Misioneros Combonianos (LMC), que se inspiran en el mismo carisma y se extienden por muchas naciones.
Nos mueve la urgencia de proponer a todos el encuentro con la persona de Jesucristo como amigo y salvador, como el único que puede dar sentido a la vida de los más pobres y victimizados de este mundo.