N. 971; (928) – TO CARDINAL GIOVANNI SIMEONI
AP, Udienze, v. 195, P II, f. 1398
Rome, 12 October 1880
Request for a dispensation.
N. 972; (929) – TO FR FRANCESCO GIULIANELLI
ACR, A, c. 15/20
J.M.J.
Rome, 16/10 80
My dear Fr Francesco,
Trate de conseguir que hagan bien los ejercicios espirituales los diáconos D. Juan Dichtl y D. José Ohrwalder; y si lo considera conveniente, como yo creo, mande que los hagan todos. Su madre de usted está bien, la he visto el otro día y esta tarde.
En Roma, Propaganda me ha tenido muy atareado con algunos Vicariatos africanos que se van a fundar más allá del Ecuador. Ya estoy casi al final de mi trabajo, y no puedo más. He trabajado día y noche, prácticamente sin hacer ninguna visita, salvo a la iglesia o convento donde he dicho misa por la mañana.
Bendigo a D. Rosignoli (al que dará mis saludos), y a todos y a todas.
Rece mucho, mucho, por
Su afmo.
† Daniel Comboni Obpo. y Vic. Ap.
N. 973; (930) – TO FR GIUSEPPE SEMBIANTI
ACR, A, c. 15/100
J.M.J.
Rome, 17 October 1880
My dear Father,
El trabajo que me ha encargado Propaganda me tiene abrumado. Escribo día y noche, tratando de darme prisa e irme pronto de Roma (y estoy sin secretario, sin ayuda: ¡es duro!, militia est!); por eso tengo aquí más de treinta cartas o paquetes de cartas que no quiero leer, para ocuparme sólo del importante trabajo de Propaganda. Pero las de usted las leo enseguida todas.
Tenga sub sigillo confessioni lo que sigue: se lo digo sólo a usted, con permiso de hablar de ello única y exclusivamente al P. Vignola, porque ni usted ni yo tenemos secretos con ese santo hombre, que, apostaría, nació casi sin pecado original, y que no aspira sino a la más pura gloria de Dios –más que todos los Jesuitas que en el mundo comen (a los que siempre querré y estimaré)–, y al bien de las almas, sin humanas pasiones, sin egoísmo, sin intereses ni segundos fines, etc. Pero sólo a él se lo puede decir, si lo cree oportuno, y no a otros, porque a pesar de todo... no siempre se sabe contener la lengua, olvidando que «al buen callar llaman santo».
Es esto:
1.° Propaganda me dio a examinar en secreto el proyecto de cuatro nuevos Vicariatos en Africa Central, que confiar a otras tantas Congregaciones eclesiásticas, los cuales comprenden la cuarta parte de toda Africa... ¡Dios mío! No todo fue hecho con la habitual reflexión, etc.; pero hay cosas buenas.
2.° Aún no soy capaz de digerir al... Párrroco de Montorio... Lo pedí por desesperación, me encomendé al Señor, recé día y noche; pero aunque el Emmo. me lo ha concedido, hay en el fondo de mi conciencia algo que me dice: «No lo tomes, porque no es hombre para eso... carece de... Además es demasiado gravoso mantener totalmente a sus tres familiares, y mantenerlos de por vida... para tomar un hombre de edad ya avanzada... que mañana puede morir..., incluso dando resultado (???), y morir como los otros».
Por eso no comuniqué nunca a El Cairo que llevaría conmigo a D. Grego, ni que D. Rolleri no volvería nunca allí como Superior... Pero el Cardenal escribió a Propaganda maravillas de D. Grego..., lo cual hizo el Emmo. de Canossa por su gran caridad hacia mí y la misión... Ya he obtenido para él, de Propaganda y del Embajador austríaco, el pasaje gratuito en primera clase... desde Triste a Alejandría; ya Propaganda se ha congratulado conmigo de que yo cuente con un experimentado Párroco, como D. Grego, etc., etc. Hasta la Embajada austríaca está contenta, porque dije que es un buen hombre... Pues bien, aun así, no lo digiero, y no sé decidirme a decir que lo tomo. Y es que (secreto de confesión) hay en mi espíritu 99 motivos para no tomarlo......
Aunque Rolleri es un hombre......
[Hay aquí cuatro líneas ilegibles, con una escritura superpuesta, de otra mano]
...... sin emgargo lo digiero más. La opinión pública veronesa no me produce ni frío ni calor... Si hubiera hecho caso de los veroneses, buenos generalmente sólo para criticar, no para ayudar, no habría llevado a cabo nada... Incluso en cuanto a Rolleri, si no lo he tocado ha sido por política y por interés, porque el Obispo de Piacenza es favorable a mí y me daría cien sacerdotes, si tuviesen vocación por Africa. Por eso... encontrándome tan frío hacia Grego, prefiero tener de nuevo en El Cairo a Rolleri que a él. Y si luego Rolleri viniese al interior, casi le perdonaría todos los pecados... En suma, rece mucho, y haga rezar. Perdone que vuelva a mi trabajo, porque urge. Ora et fave.
Suyo afmo. † Daniel Obpo.
N. 974; (931) – TO MGR GUGLIELMO MASSAIA
AGFCR, Lettere ricevute dal Massaia
Rome, 18/10 80
Your Most Reverend Excellency,
Finalmente he terminado un trabajo que me ocupaba. Cansado y abrumado, quiero tomarme un pequeño respiro, y el miércoles o el jueves iré a ver a mi querido Monseñor y Padre. Con ser mi grito de guerra «Nigricia o muerte», sólo me alcanza una chispa de ese celo apostólico de usted, Monseñor, que es el veterano de las batallas africanas, y que experimentó más que todos y antes que todos la dulzura de las privaciones, y las arduas dificultades del apostolado africano, probando en sí mismo la espléndida verdad, corroborada por una larga experiencia, de que Cristo fabricó la Cruz y no la carroza para ir al paraíso y conducir allí a los demás.
Supe por un hijo de San Jerónimo Miani que el Rmo. Rector ha vuelto de Irlanda y está en Ruffinella: déle muchos recuerdos, así como al Vicerrector, al Ecónomo, a los Profesores, etc. Besándole el sagrado anillo, implora su bendición
Su afmo. hijo
† Daniel Comboni
Obispo y Vic. Ap.
Saludos a mis alumnos negros.
N. 975; (932) – TO FR ANGELO TAGLIAFERRO
SP SC Collegi Vari, f. 1317v
Rome, October 1880
My dear Fr Angelo,
El sábado volví del Vaticano lleno de entusiasmo, porque permanecí sentado con el Papa León XIII durante hora y media, y estuve con él media hora más en el Salón del Trono. El Papa León XIII es todo fuego por Africa, y aunque han pasado dieciséis meses desde que recibió a mis últimas cinco Hermanas (con Sor Amalia de Superiora), me dijo que está entusiasmado por el espíritu de sacrificio que vio en ellas, unido a tanta sencillez. El había preguntado entonces a Sor Amalia Andreis si no tenía miedo de la muerte; y su respuesta de que sería dichosa de morir incluso inmediatamente por amor a Cristo y a los negros lo tiene todavía impresionado, y me confesó su admiración.
Para mí es bastante esa satisfacción del Papa.
Luego, yo le di a conocer el asunto de Sestri, explicándole que un caritativo sacerdote llamado Tagliaferro me ha donado un adecuado inmueble, un antiguo convento dominico, etc., de lo cual se alegró mucho. Y dijo el Papa: «Deseo toda suerte de bendiciones a esta nueva obra, y hago votos porque arraigue y se desarrolle para bien de Africa y de las almas. Bendigo también de corazón al generoso bienhechor que le ha ayudado donándole el inmueble, etc. El Señor lo conserve y le dé todo bien y le retribuya esta buena acción, que estará escrita en el libro de la vida y Dios tendrá en cuenta por toda la eternidad».
Esto es en sustancia lo que me dijo para usted. Dio además una bendición especial para su hermana María; otra también para mi padre, con el deseo de que se multipliquen sobre él las gracias, y bendijo a mi prima Teresa y a toda la casa africana de Sestri. Yo le pedí una bendición para su excelente hermano sacerdote. Mando la mía para todos.
Suyo afmo.
† Daniel Obispo y Vic. Ap.
N. 976; (933) – TO CANON G.C. MITTERRUTZNER
ANB
Verona, 9 November 1880
Dulcissime rerum,
Estuve y estoy ocupadísimo: ésta es la única razón de mi silencio. Pero usted se halla en mi mente y en mi corazón, y la próxima semana (en que salgo para Africa) antes de partir le escribiré una larga carta, porque tengo muchas cosas que decirle.
Entretanto reciba una amplia bendición del Santo Padre, que yo habría debido mandarle desde Roma después de la audiencia privada de casi dos horas que tuve con él. Mil respetuosos saludos a Su Alteza, a quien (y a usted) pronto mandaré una pequeña memoria que he publicado sobre los Descubrimientos en Africa, en la que, aunque poco, se habla de Mitterrutzner.
Vale et fave.
Tuissimus ad. † Daniel Ep.
N. 977; (934) – HAND-WRITTEN WILL COPY OF HIS FATHER’S WILL – LETTER TO THE HEIRS
AP SC Afr. C., v. 8, ff. 1108–1109v
J.M.J.
The Will and Testament of Mgr Comboni and his Father
Verona, 11 November 1880
Yo, Daniel Comboni, Obispo de Claudiópolis y Vic.° Aplico. de Africa Central, mediante mi presente Testamento ológrafo nombro mis herederos universales de todos los bienes muebles e inmuebles de los que me encontrare en posesión a la hora de mi muerte, tanto en Europa como fuera de Europa (y siempre sin perjuicio de los legítimos derechos de mi padre, si me sobreviviere), a los muy Revdos. Misioneros Aplicos. D. José Sembianti, hijo de Francisco y natural de Vervò, en el Trentino, actual Rector de mis Institutos Africanos de Verona, y a D. José Marchesini, hijo de Luis y natural de Verona; y esto con la condición de que si uno de ellos muriese antes de entrar en posesión de la herencia, se transfiera la totalidad de la misma al superviviente.
En este documento, con el que anulo todo otro testamento o codicilo hecho por mí hasta hoy, queda expresada mi última voluntad.
Verona, 11 de noviembre de 1880
(L. S.)
† Daniel Comboni Obispo de Claudiópolis
y Vicario Aplico. de Africa Central
Copia del Testamento de mi padre
Luis Comboni, de 77 años
J.M.J.
Verona, 11 de noviembre de 1880
Disponiendo de mis pequeños bienes para en caso de muerte, nombro mi heredero a mi hijo Mons. Daniel Obispo; y en la eventualidad de que él me premuriese sean mis herederos los señores Misioneros Aplicos. D. José Sembianti, hijo de Francisco y natural de Vervò, en el Trentino, y D. José Marchesini, hijo de Luis y natural de Verona, con la especificación de que si uno de ellos falleciere antes que yo, toda mi pequeña herencia quede a favor del otro. Lego a mi sobrina Teresa Comboni, hija de Faustino, el poco mobiliario de mi casa; y además mi heredero o herederos deberán pasar a dicha sobrina mía, Teresa Comboni, media lira (50 céntimos) italiana al día vitaliciamente.
Anulo con este escrito cualquier otra cosa que yo haya dispuesto como mi última voluntad.
Verona, 11 de noviembre de 1880
Luis Comboni, hijo de Bartolomé
A mis Herederos
Verona, 11 de noviembre de 1880
Con mi Testamento ológrafo del día de la fecha he dispuesto de mis bienes, dondequiera que se hallaren, en favor de los muy Revdos. Sres. Misioneros Aplicos. D. José Sembianti y D. José Marchesini, a los cuales, confiado en el total cumplimiento de mi última voluntad, doy las siguientes instrucciones:
Descontado el importe de los gastos necesarios para mis funerales y sufragios, todos los bienes reunidos con mis esfuerzos o por herencias presentes o futuras, o los que la bondad de mis bienhechores me haya confiado en favor de Africa Central o de la santa Obra de la Redención de la Nigricia, etc., todos esos bienes, digo, deberán ser empleados por mis herederos en la mencionada Obra para las Misiones de la Nigricia y Africa Central de la que estoy al frente con objeto de convertir a la fe católica y a la civilización cristiana aquellos infelices pueblos.
Y si en el momento de mi muerte, o después de ella, se produjere el cese de dicha Obra o Misión, mis herederos deberán poner todo a disposición del Sumo Pontífice entonces reinante y del Emmo. Cardenal Prefecto General de la S. Congregación de Propaganda Fide.
Esta es mi última voluntad en el caso enunciado.
Verona, 11 de noviembre de 1880
(L. S.)
† Daniel Comboni Obispo de Claudiópolis
y Vicario Aplico. de Africa Central
Este mi Testamento y el de mi Padre, escritos por mí de mi puño y letra, y estas instrucciones a mis herederos, quedan depositados en el Archivo del M. R. Rector del Insto. de las Misiones para la Nigricia, en Verona. Además, mis herederos los Misros. Aplicos. D. José Sembianti y D. José Marchesini harán enseguida su propio testamento a favor de personas íntegras y de confianza, a fin de que después de mi muerte sea siempre respetada mi última voluntad y perfectamente ejecutada.
Verona, 11 de noviembre de 1880
(L. S.)
† Daniel Obispo de Claudiópolis
Vic. Aplico. de Africa Ctral.
N. 978; (936) – TO CARDINAL GIOVANNI SIMEONI
AP SC Afr. C., v. 8, ff. 1106–1107
J.M.J.
Verona, 21 November 1880
Most Eminent and Reverend Prince,
El viernes he embarcado en Trieste a un sacerdote, un catequista y tres Hermanas, y mañana saldré para Sestri y Roma con tres Hermanas, más una griega cismática convertida y dos hermanos laicos, pensando en embarcarme junto con ellos en Nápoles, el sábado al mediodía, en las Messageries. El miércoles o el jueves estaré en Roma para presentar mis respetos a V. Em.a y recibir su bendición.
Para ese día imploro de V. Em.a Rma. la gracia de tener preparadas tres cédulas para tres Hermanas de mi Instituto de las Pías Madres de la Nigricia, y hacerlas visar enseguida por la Embajada francesa. Se trata de:
Sor Rosalía Conti
Sor Francisca Dalmasso
Sor María Casella
todas ellas del Insto. arriba indicado.
San José me ha hecho esta vez una mala faena. Ha permitido que yo pierda cerca de 20.000 (veinte mil) francos que había entregado en depósito a mi ex banquero Brown, que tantas veces, haciéndome falta dinero, me prestó hasta 10.000, 15.000 y incluso 20.000 liras de una sola vez y sin intereses. A mi vuelta de Frascati el mes pasado, le había ordenado que me tuviese preparadas 400 libras esterlinas y 600 napoleones de oro para la primera semana de noviembre, y él me dijo que para esas fechas lo tendría todo a mi disposición, y los 600 nap. incluso inmediatamente. Y ahora estoy en un aprieto. Pero como San José tarde en socorrerme, voy a verme obligado a recurrir a su Señora, que tiene todo el interés en que él quede como un Pepe: así que tendrá que proporcionarme el doble.
Ya en 1872, cuando marché a Africa Central como Provicario, hice testamento nombrando mi heredero al Emmo. de Canossa. Pero como a medida que yo envejezco (49 años cumplidos) tampoco él se mantiene joven, he seguido el consejo de un eminente jurisconsulto y hemos hecho testamento mi padre y yo, documentos que he entregado a mi Rector, el cual a su vez hará depositario de ellos al Obispo, y de los que mando a V. Em.a Rma. copia autógrafa, pues deseo que todo sea hecho según el espíritu del Santo Padre y de Vuestra Eminencia.
Le beso la sagrada púrpura y me declaro
Su devotmo. y obedmo. hijo
† Daniel Obispo y Vicario Aplico.
N. 979; (937) – TO FR GIUSEPPE SEMBIANTI
ACR, A, c. 15/101
Verona, 22 November 1880
Faculties granted.
N. 980; (938) – TO CARDINAL GIOVANNI SIMEONI
AP SC Afr. C., v. 8, f. 1111
J.M.J.
Rome, 25 November 1880
Most Eminent and Reverend Prince,
A causa de la inesperada quiebra del banquero Brown, me encuentro en el más grave aprieto. Ese viejo inglés, a petición mía, me había prometido tenerme preparado mi dinero en las correspondientes libras esterlinas a mi paso por Roma, previsto para el 4 de noviembre. Con las 20.000 liras, aproximadamente, que yo tenía depositadas en su banco no sólo pensaba realizar mi expedición a Africa Central, sino además atender en parte a las graves necesidades del Vicariato. Este saldo a mi favor es absolutamente incobrable, porque al Sr. Brown no le ha quedado más que un poco para ir viviendo unos meses.
Nunca hasta ahora he pedido ayudas a la S. Congregación. Pero encontrándome impelido por urgentes necesidades, y teniendo que marchar enseguida a mi Vicariato, imploro con el ruego más ferviente que V. Em.a Rma. se digne concederme un pronto socorro de 20.000 liras (digo veinte mil), bajo la promesa por mi parte de que trataré por todos los medios posibles, si Dios me concede todavía unos años de vida, de devolver a las cajas de Propaganda la cantidad que ahora humildemente suplico.
Seguro de que en su eximia caridad V. Em.a Rma. se compadecerá de mi crítica situación, me inclino a besar la sagrada púrpura y me suscribo con la veneración más profunda
De V. Em.a Rma.
hummo., obedmo. y devotmo. hijo
† Daniel Comboni Obpo. y Vic. Ap.