FELIZ PASCUA DE RESURRECCIÓN

en el año de la canonización

del Beato Daniel Comboni


DIRECCIÓN GENERAL

Establecida oficialmente la fecha del 5-10-2003 para la canonización de Comboni
El Papa tuvo el 7 de marzo de 2003, por la mañana, en la sala Clementina del palacio Apostólico Vaticano, el Consistorio ordinario público, para la inscripción de 12 beatos en el Registro de los Santos, entre ellos, nuestro Fundador.
En la reunión, el Papa estableció que la canonización de Comboni tenga lugar el 5 de octubre de 2003. Con Comboni, el mismo día, serán canonizados los beatos Arnold Janssen, fundador de los Verbitas y Joseph Freinademetz, verbita.
Estaban presentes en el Consistorio, tres miembros del Consejo General de los Combonianos, tres de las Combonianas, dos de las Misioneras Seculares, el postulador, P. Arnaldo Baritussio mccj, el provincial de Italia, P. Francesco Antonini y el P. Fidel González Fernández mccj. Presentes también el arzobispo de Kartum, Mons. Gabriel Zubeir Wako, el obispo de Verona, Mons. F. Carraro, el obispo emérito de Verona, Mons. A. Nicora y el Comboniano, Mons. Romeo Panciroli. No pudieron participar el obispo de Brescia, porque estaba de visita en las misiones de Mozambique, y el P. Pietro Chiocchetta mccj, convaleciente.
No nos queda más que agradecer al Señor y prepararnos bien a la canonización.

Miembros de la Comisión Precapitular
Con la muerte del P. Legonou Jean Pierre y el nombramiento de un representante para los Hermanos, los miembros de la comisión son: P. Baldan Fabio, Hno. Casagrande Alessandro, P. García Castillo Jorge Oscar, P. Miante Girolamo, P. Serra Teresino, P. Tesfamariam Ghebrecristos Weldeghebriel.
El P. Ikundu John, observador en el capítulo, ha sido nombrado miembro adjunto.

Próxima Consulta del Consejo General
Próxima Consulta del Consejo General: 12-22 junio, 2003.

Lema Canonización Daniel Comboni
(traducciones hechas con la ayuda de las comisiones provinciales europeas)

• A THOUSAND LIVES FOR THE MISSION
“Holy and dedicated… to make common cause… with the poorest and most abandoned” (Daniel Comboni)

• MILLE VITE PER LA MISSIONE
“Santi e capaci… per far causa comune… con i più poveri e abbandonati” (Daniele Comboni)

• MILLE VIES POUR LA MISSION
“Saints et capables… pour faire cause commune… avec les plus pauvres et abandonnés” (Daniel Comboni)

• MIL VIDAS PARA LA MISIÓN
“Santos y capaces... para la causa común... con los más pobres y abandonados” (Daniel Comboni)

• MIL VIDAS PARA A MISSÃO
“Santos e preparados... dispostos a partilhar... a sorte dos mais pobres e abandonados” (Daniel Comboni)

• TAUSEND MAL UND NOCH VIEL MEHR IM DIENST DER EVANGELISIERUNG
“In Heiligkeit und Selbsthingabe… solidarisch sein… mit den Ärmsten und am meisten Vernachlässigten” (Daniel Comboni)

• GDYBYM ŻYŁ NAWET TYSIĄC RAZY – WSZYSTKO ODDAŁBYM MISJOM
“święci i zaangażowani…na rzecz solidarności…z najbiedniejszymi i opuszczonymi” (Daniel Comboni)

Curso de Renovación de Roma en Limone sul Garda
Los padres y hermanos del Curso de Renovación de Roma, presentes en Limone para un taller sobre el carisma comboniano, comenzaron en el pueblo natal del Fundador el Año Comboniano, como preparación a la canonización del Beato Daniel Comboni.
Una celebración de la Palabra la mañana del 15 de marzo en el Tesöl, puso a los participantes en contacto con los últimos momentos de la vida de Mons. Comboni. Se evocaron también las líneas inspiradoras de la misión comboniana, a las que todos expresaron su aprobación en forma ritual. Una ferviente oración puso ante Dios las necesidades de la misión, del Instituto y de los hermanos.
Por la tarde, en la iglesia parroquial, una solemne concelebración presidida por uno de los padres del curso, reunió a numerosos habitantes de Limone. En la homilía se pusieron de relieve algunos de los valores típicos de Comboni misionero, tales como la evangelización de los africanos y la promoción de su dignidad.

Artículo sobre Comboni en el Osservatore Romano
El Osservatore Romano, el 13 de marzo, publicó a toda página una presentación de Comboni, preparada por el P. Fidel González Fernández.
RADIOUNO (TV Italiana)
RADIOUNO del domingo, 16 de marzo, en el programa "Oggi 2000", dedicó 30 minutos a Comboni y a los Institutos Combonianos, con entrevistas directas.

Secretaría General

Relaciones para el Capítulo General
Están llegando al secretario general las relaciones de las provincias y delegaciones, para el XVI Capítulo General. Recordamos a los provinciales/delegados (o a quienes los suplan) que las relaciones deben ser en dos lenguas: la lengua oficial de la provincia/delegación y en otra (neolatina o anglosajona, según las circunstancias).
Además de los textos impresos, les rogamos envíen también los textos por correo electrónico en anexo "RTF".

Economato General
Se ha publicado en italiano, español e inglés el nuevo Directorio General para la Economía (D.G.E.), aprobado ya por el Consejo General en octubre de 2002. La edición típica continúa siendo la italiana. Esta actualización del D.G.E. ha intentado poner en regla todas las aplicaciones aprobadas y emanadas del Capítulo de 1997 y las opciones de las Asambleas de los ecónomos hechas y aprobadas durante estos seis años. El texto en las tres lenguas se ha enviado por correo electrónico a todos los superiores y ecónomos provinciales y de delegación y a los escolasticados. Se enviará también por correo a todas las provincias y delegaciones.

Votos Perpetuos
Esc. Torres Castañeda Luis Fernando (M) Chicago (NAP) 08-02-2003
Esc. Malásquez Quispe Carlos Alberto (PE) Chicago (NAP) 08-02-2003
Hno. Todjohon Luc Mathurin (T) Toffo (BENIN) 15-03-2003

Ordenación sacerdotal
Esc. Aleti A. Z. Chris (U) Ochodri (U) 01-03-2003

Publicaciones

Mons. Romeo Panciroli, L’appartamento delle Udienze Pontificie, Libreria Vaticana 2002, p. 216, € 70,00.

P. Pietro De Angelis, Vocabolario Zande, Trieste 2002, p. 420, bajo la dirección de la Universidad de Trieste. Es un vocabulario Zande con traducción italiana. Quien desee ejemplares, pídalos al P. Pietro Ravasio (Roma EUR).

Francesco Accardo, Un approccio alla spiritualità di Daniele Comboni: missione e laicità. Artículos de 16 p. En la revista “Il pungolo”, S. Maria Capua Vetere (CE).

P. Lorenzo Gaiga, Con la pace nel cuore (P. Gualberto Bormolini), p. 192, Brescia 2003. Pedirlo al autor.

Actualización del Anuario
• COLOMBIA: BOGOTÁ 1 - Nueva sede de la delegación y C.A.M.
Misioneros Combonianos
Calle 42, N° 13-50
Santafé de Bogotá (Colombia).
Tel. 57-1/245.4754; 57-1/245.4763
Fax 57-1/340.6440 (sup. del.) 57-1/245.3342 (C.A.M.)
E-mail: mccjcolombia@077mundo.com (sup. del.)
josgirau@hotmail.com (sup. del.)
sinfronteras@077mundo.com (C.A.M.)
• CURIA: CASTELGANDOLFO - Nuevos números telefónicos y de Fax
Tel. 06/69.88.78.95; 06/69.88.78.15; Fax 06/69.88.78.31
• ERITREA: Nuevo correo electrónico de Mons. Tesfamariam
Menghesteab: kimehret@gemel.com.er
• CONGO: Nuevo correo electrónico de AFRIQUESPOIR (P. Nazareno
Contran) afriquespoir@ic.cd
• KENYA: Nairobi 2 - Kariobangi: El código postal es 00100 (no 00615)
• LONDON PROVINCE - Nuevo WEB-SITE: www.comboni.org.uk
Nuevo correo electrónico de la procura: londonprocure@hotmail.com
• MOZAMBICO: MUERIA – Nueva dirección postal:
Missionários Combonianos, C. P. 84, 78100 NACALA (Mozambico)
Tel. 06/520465. E-mail: max68rob@yahoo.it (del P. Massimo Robol)

Obra del Redentor

Abril 01-15 DSP 16-30 ESPAÑA

Mayo 01-07 ETHIOPIA 08-15 ERITREA 16-31 ITALIA

Intenciones de oración

Abril
Para que, los nuevos desafíos misioneros del mundo de hoy y de la Iglesia, nos empujen a profundizar siempre más nuestra común espiritualidad misionera: oremos.
Mayo
Para que, todas las mujeres del mundo, con la ayuda de María, se liberen de las opresiones que limitan su libertad y desfiguran su dignidad: oremos.

CONGO

Semana Filosófica en Kisangani
El Instituto de Filosofía “Edith Stein”, coordinado por los PP. Mileto Palmiro y Jorge Domingues de Oliveira, organizó del 17 al 21 de marzo, la 6ª semana filosófica en Kinsangani: una iniciativa que ha implicado, no sólo a los postulantes Combonianos, Dehonianos y Monfortianos, sino también a muchos estudiantes universitarios, presentes en gran número en la ciudad de Kisangani y a amplios sectores de la sociedad civil. La semana tuvo como tema: "El Tiempo y la Mundialización" y analizó las consecuencias del fenómeno de mundialización acerca de la comprensión del tiempo y el espacio en la concepción africana, poniendo en evidencia las esperanza y los temores que suscitan en los africanos este nuevo modo de vivir el tiempo.
No hay duda, se dice en las conclusiones de la semana, que la mundialización está produciendo en África cambios en la noción del tiempo e induce al hombre mismo a percibirse de modo diferente. Los que estén interesados en tener las actas de la semana, escriban directamente al P. Mileto (palmiro@inmarsat.ocicnet.net).


CURIA

Apertura del Año Comboniano
En la tarde del 14 de marzo, vigilia del cumpleaños del Beato Daniel Comboni, Mons. Robert Sarah, secretario de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos (C.E.P.), abrió oficialmente el Año Comboniano como preparación a la canonización del Beato Daniel Comboni, con una conferencia y la celebración de la Eucaristía, en la capilla de la Curia de los Combonianos, en Roma. Mons. Sarah habló de "Comboni, África, Iglesia local", iniciando el tiempo de estudio, reflexión y oración para la preparación y el "después" de la canonización del Beato Daniel Comboni. Mons. Sarah recordó que las intuiciones de Daniel Comboni, forman parte de una historia de gracia y son todavía válidas hoy para afrontar los nuevos retos y las nuevas situaciones misioneras. Tras las huellas de los documentos de la Iglesia, de los Escritos y del "Plan" de Daniel Comboni, Mons. Sarah expuso que la misión nace del encuentro con Dios amor, del encuentro personal con el Santo, y que el misionero hombre de Dios y para Dios, y hombre de la Iglesia, es un evangelizador y promotor de la dignidad humana. Hombre de paz que revela a Cristo escondido en los pobres. Concluyó con un llamamiento a la teología de la Cruz, haciendo notar que en la historia de Africa siempre ha estado asociada al sufrimiento de Dios.
Antes de la llegada de Mons. Sarah, el P. Venanzio Milani hizo una breve relación sobre los trabajos de preparación para la canonización del Fundador desarrollados por las diversas comisiones, establecidas "ad hoc" por los Consejos Generales de los Institutos Combonianos y en las provincias/delegaciones, y aludió a algunas iniciativas de relieve relacionadas con el calendario del acontecimiento (vigilia de oración, canonización, misa de acción de gracias), y a otras actividades emprendidas también con la colaboración del Ayuntamiento de Roma. Interesante la propuesta del alcalde de organizar una "jornada por África" (en fecha que todavía hay que decidir), con la apertura de un cierto número de escuelas medias a los misioneros y misioneras, para promover un mejor conocimiento de los pueblos y del trabajo que aquellos desarrollan. Si son rosas… (florecerán).

CIAM: Encuentros para sacerdotes asiáticos y africanos
Cerca de setenta sacerdotes africanos, presentes en Roma para estudios y otros compromisos, participaron en una jornada de reflexión, participación y oración, sobre el tema: "Africa hoy: ser ministros de reconciliación en el contexto de los conflictos actuales". Después de una presentación global del tema a cargo de algunos especialistas, los participantes lo profundizaron en los grupos y en el plenario, mientras el arzobispo africano, Mons. Robert Sarah, secretario de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, guió el momento de oración. El encuentro tuvo lugar el 8 de marzo, en el Centro Internacional de Animación Misionera (CIAM), por iniciativa del director, P. Romeo Ballan, mccj.
En el mismo Centro y con características semejantes, una semana antes se había desarrollado el encuentro para sacerdotes asiáticos, que reflexionaron sobre un reto sobre la misión en "Asia hoy: ser ministros del Evangelio en situaciones de minoría". Los participantes pidieron al CIAM que se hiciera promotor de otros encuentros de este tipo, extendiéndose también a otras categorías de evangelizadores: americanos, religiosas, laicos.


EGITTO

Setenta años de vida misionera
El 15 de febrero, todos los Combonianos de la región del Cairo se reunieron en Helwan, para el Retiro mensual y en esta ocasión, celebraron con gozo y con agradecimiento al Señor, los setenta años de profesión del Hno. Lino Cremona, todavía activo después de tantos trabajos, a pesar de sus 90 años cumplidos. Entre otras cosas, también para la Navidad del 2002, hizo un bello nacimiento, con movimiento y juego de luces, que fue la atracción, no sólo de los pequeños, sino también de los adultos. Llegado a Egipto desde el Sudan en 1939, ha permanecido siempre allí, excepto un período de ocho años en Congo. Le deseamos que cumpla los 75 ¡y más!

Aquella rotación…
El mismo día despedimos al P. Alessandro Bedin que, después de dos años de estudio del árabe en Dar Comboni y el trabajo de cuatro años y medio en la parroquia y en la escuela de Helouan, ha sido llamado a Roma, para prepararse a trabajar en la formación de base. Gracias y enhorabuena.

Celebración solemne
En la iglesia "Cordi Jesu", fundada por el Beato Daniel Comboni, se tuvo la celebración solemne del 172 aniversario del nacimiento del Fundador, se recordó el 7º aniversario de la beatificación y se dio comienzo al Año Comboniano de preparación a la canonización del Beato Daniel Comboni. Presidió el patriarca copto católico, en presencia del cardenal Stephanòs II Ghattàs, con liturgia en rito copto, concelebrada por veinte sacerdotes. Estaban presentes los Combonianos y Combonianas de la zona del Cairo, muchas religiosas de otros Institutos, diversos fieles, en representación de las parroquias donde trabajan los Combonianos y las Combonianas y un buen grupo de Sudaneses que acompañaron la celebración con cantos y tambores. Se ha ejecutado por primera vez un nuevo himno, titulado "Seguirte, Comboni", con letra y música del P. Sergio Chesini, dirigido por él. Después de la celebración se ofreció a todos un pequeño refresco. En la iglesia y en el patio se expusieron "pósters" y se presentaron libros sobre Comboni en varias lenguas. Fue un momento intenso de animación misionera.

De viaje... tras las huellas de Comboni
Los PP. Vittorio Barin y Giuseppe Benito Cruciani, de la comunidad de Assouan, participaron en dos encuentros en Assiut, donde se reunieron todos los sacerdotes de las cuatro diócesis copto-católicas del Alto Egipto (un centenar), y en un encuentro de treinta religiosas de la diócesis de Sohag. El P. Cruciani presentó más de ocho veces también en algunas parroquias, la proyección -por medio del ordenador (power point)- de la serie compuesta por él, respecto al primer viaje a Africa de Daniel Comboni, con acotaciones en árabe, recogidas después en un folleto impreso y distribuido a los sacerdotes. Otras serie están en preparación. Los dos Padres han sido invitados a visitar y animar diversas parroquias. La acogida, incluso de los obispos, fue calurosa. Oramos para que esta iniciativa dé sus frutos.


ERITREA

Eritrea… ¡todavía hambre!
Esta joven y pequeña nación del Cuerno de Africa, que busca con todas sus fuerzas estabilidad y paz, de nuevo está oprimida por acontecimientos unos naturales y otros no, que la abaten.
Independiente desde 1993, Eritrea tiene una superficie de 124.357 km2 con alrededor de 3.500.000 habitantes. El aspecto geográfico y el clima son muy variados. La zona de la Dancalia y la zona del Sahel son desérticas. La altiplanicie central y la llanura occidental son las zonas más pobladas, donde la agricultura, constituida por maíz, sorgo, trigo, cebada, está desarrollada principalmente; sólo en pequeñas zonas más ricas de agua se cultivan huertos. La subsistencia de la población está basada principalmente en la agricultura y en el pastoreo. Ya en condiciones normales, Eritrea está en grado de producir sólo el 40 % de sus necesidades alimenticias, mientras el resto, en parte es importado, y en parte proviene de las ayudas internacionales. En el 2002 las pequeñas lluvias del período marzo-junio, muy importantes para la agricultura, han faltado; las grandes lluvias, junio-septiembre, han llegado con retraso de cuatro semanas, por lo que los cultivos no han tenido tiempo suficiente para madurar. La cosecha ha sido la más escasa desde 1993. El ganado ha disminuido el 20 % respecto a 2001.
Para ayudar a la gente, en el 2003 se necesitaron 601.200 toneladas de cereales. Las personas con más riesgo son alrededor de 2.500.000, pero 1.400.000 personas tienen necesidad de ayuda inmediata, antes de que sea demasiado tarde. Los más afectados son los ancianos, los niños y las mujeres que son la mayoría de la población.
Las misiones católicas son asaltadas de peticiones: también los centros sanitarios gubernativos piden ayuda porque hay graves casos de falta de alimentación, sobre todo en las zonas de Keren, Assab, Barentu y cerca de la frontera con Etiopía, donde ya hace años que la cosecha era insuficiente, a causa de la irregularidad y escasez de las lluvias.


ITALIA

Justicia, Paz e Integridad del Creado
El 6 de marzo pasado, la nueva Comisión Justicia, Paz e Integridad de la Creación, si reunió por primera vez en Florencia, estando presentes también tres Combonianas y el P. Fernando Zolli, secretario general para la evangelización. El primer momento se dedicó al análisis de las reflexiones, actividades y acciones específicas en las que los Institutos Combonianos en Italia están actualmente comprometidos: desde los medios de comunicación a las propuestas del Jubileo de los oprimidos y de los GIM; desde la inserción en la realidad de marginación (Castelvolturno) a la presencia pastoral decenal entre los emigrados (ACSE); de las campañas de presión, a la colaboración con varias diócesis; de la mirada nacional, al ojo vigilante y constante sobre Bruselas y los movimientos europeos. En el segundo momento, la comisión especificó los ámbitos de servicio en los que piensa actuar:
- nivel nacional interno (comunidad): sensibilizar a los hermanos sobre temas referidos a la justicia y la paz y proponer consiguientes cambios prácticos (recorridos bíblicos, ejercicios espirituales, estilos de vida, uso y distribución de bienes, compromiso con los excluidos, etc.).
- Nivel nacional externo (iglesia local/sociedad): ponerse en red con las realidades diocesanas (comisiones de justicia, paz e integridad de la creación) y la sociedad civil (movimientos: Red de Lilliput, Pax Christi, Mesa de la Paz, etc.).
- Nivel europeo: ponerse en red con los Institutos religiosos que se mueven alrededor de Bruselas y el parlamento europeo, para velar sobre las decisiones que se refieren a la cooperación internacional y otros asuntos.


KENYA

Encuentro de los Hermanos Combonianos
Durante el fin de semana del 8-9 de marzo, se tuvo en el Centro Internacional de Hermanos de Nairobi, un encuentro de casi todos los Hermanos Combonianos presentes en Kenia: unos veinte entre los que están en formación y los que están en misión. El encuentro fue organizado por el Hno. Hans Eigner, miembro del consejo provincial de Kenia, para volver a pensar juntos en la figura del Hermano y su formación, para presentar al Capítulo General puntos concretos para discutir. Los Hermanos han quedado todos entusiasmados del encuentro y de la convivencia y se han comprometido a ofrecer una contribución personal a la promoción de la vocación del Hermano.

Apertura del Año Comboniano
La apertura del Año Comboniano de preparación a la canonización del Beato Daniel Comboni en Kenia se ha realizado en dos tiempos.

- El sábado, 15 de marzo, tuvimos una celebración "familiar" en la casa provincial de Ngong Road, en la que participaron casi un centenar de Combonianos/as y postulantes de las cuatro provincias de Kenia y Sudán Sur. Se abrió con una conferencia sobre Comboni del P. Umberto Pescantini que intentó presentar hechos significativos en la vida del Fundador que puedan llevarnos a la solución pacífica de los conflictos y de las controversias. El texto de la conferencia se hizo circular por el sitio internet "combonisanto". Siguió la Misa y después un hermoso ágape fraterno. Nos hemos sentido verdaderamente una familia alrededor del Fundador, más allá de nuestras diversidades y dificultades.
- Domingo 16 de marzo, un buen número de Combonianos/as, amigos y bienhechores de nuestros Institutos se reunieron en la catedral de Nairobi, donde participaron en una solemne Misa de la comunidad cristiana local. Durante la celebración se quitó el velo que cubría un hermoso cuadro de Comboni (1,20x2,40m), obra del artista local Njoroge, inserto en el ábside de la basílica. La Sta. Misa fue presidida por el provincial de Kenia que, en la homilía, desarrolló el tema de la transfiguración o, como decía Comboni, de la "regeneración" de Africa.


KHARTOUM

Comienzo oficial del pre-postulantado
Hemos comenzado oficialmente el pre-postulantado el 5 de marzo pasado, en El-Obeid, con el P. Kabeya Mbinze Janvier como responsable. La elección de El-Obeid ha sido motivada por una opción de descentramiento de Kartum, donde actúan la mayor parte de los Institutos presentes en Sudan. En El-Obeid tenemos una casa, propiedad del Instituto que, en el futuro, podría convertirse en la casa del pre-postulantado.
Actualmente los pre-postulantes son diez. Tres no han podido venir todavía porque están "bajo las armas", a pesar de haber prescrito su tiempo de reclutamiento. Están hospedados por el momento, en el centro pastoral diocesano. A Mons. Antonio Menegazzo, administrador apostólico de El-Obeid, desde el principio, le ha entusiasmado la elección, e igualmente al clero local. Otros hermanos de la provincia, junto con nuestra comunidad de El-Obeid, ayudarán alternándose, al P. Janvier.

Apertura del Año Comboniano
El viernes, 14 de marzo, vigilia del nacimiento de Mons. Comboni, todos los Combonianos y las Combonianas presentes en Kartum, se reunieron en Masalma, para comenzar con una vigilia el Año Comboniano de preparación a la canonización del Beato Daniel Comboni. El encuentro y la oración fueron preparados por la comisión para la canonización y, en modo particular, por el P. Salvatore Marrone, la Hna. Cecilia Fierro y el P. José Alberto Pimentel Guzmán. Cada comunidad llevó un símbolo significativo de su presencia y de su trabajo en Kartum. Símbolo que después se intercambió entre las distintas comunidades.
La iglesia de Masalma tiene un significado histórico muy fuerte para nosotros. Representa un poco la "regeneración" de la misión y el plan de Comboni. Fue construida en el lugar donde vivió el P. Orwalder a su vuelta, después de la Mahdia y es el lugar donde vivió Grigolini.
Dentro de la iglesia hay un cuadro de la Virgen traído por Mons. Antonio María Roveggio y ante el que celebró la misa de Epifanía de 1900, con motivo de la apertura de la misión. Nuestra oración se hizo frente al crucifijo traído por los misioneros después de la Mahdia. Ante este crucifijo muchísimos de nuestros misioneros han encontrado la fuerza, durante los difíciles primeros años de la misión de Sudan.


NAP

Os recordamos la nueva dirección de la casa provincial
A pesar de la información aparecida el verano pasado en la "actualización del anuario 2002", muchos continúan enviando el correo a la oficina del provincial, usando la antigua dirección. Pronto la oficina de correos interrumpirá el servicio de enviar la correspondencia a la nueva dirección, con la consiguiente pérdida del material dirigido a nosotros. Por favor, recordar que desde julio de 2002, no estamos ya en 8108 Beechmont Ave. La nueva dirección es: 1318 Nagel Road, Cincinnati, OH 45255-3120 (Familia Comboniana - septiembre 2002).

Celebraciones combonianas
El sábado, 14 de marzo, la comunidad de Cincinnati, en la casa provincial, celebró la apertura de las celebraciones del Año Comboniano de preparación a la canonización del Beato Daniel Comboni, con una solemne celebración Eucarística en la que participaron también el personal y las Auxiliares Combonianas. El provincial, P. Dennis Conway, ofició como celebrante principal. Después hubo una comida para todos los presentes. Análogas celebraciones se hicieron en todas las comunidades de la provincia, durante el fin de semana del 16 de marzo.
Entretanto, informaciones al respecto, se han enviado a más de doscientas publicaciones que son miembros de la Asociación Periodística Católica y a la prensa local.

PERU-CHILE

Apertura del Año Comboniano
El 15 de marzo, en la casa de Monterrico, acogiendo la invitación de nuestro/as Superiores de la familia comboniana, hemos comenzado el Año Comboniano de preparación a la canonización del Beato Daniel Comboni, con una reunión, que duró media jornada, de los representantes de todas las comunidades de Lima.
Una comisión representativa de Combonianos, Combonianas y LMC propuso a los participantes espacios bien organizados para la animación, la reflexión y la oración, para vivir la primera parte de la mañana. A continuación, nos reunimos en torno al altar para la celebración eucarística, presidida por el provincial, P. Conrado Lorenzo Franco, que compartió con nosotros algunos puntos propuestos por los Consejos Generales de los Institutos de la Familia Comboniana, invitándonos a vivir con intensidad este tiempo de gracia, como preparación a la canonización de nuestro Fundador.
Al final, se anunciaron oficialmente las diversas iniciativas que se llevarán adelante en el curso del año y, confiados en que el "esposo está con nosotros", hicimos un paréntesis en el tiempo cuaresmal, terminando con una comida fraterna.


PORTOGALLO

El Año Comboniano… ha comenzado
Con la presencia de más de cincuenta entre laicos, seculares, religiosas, hermanos y sacerdotes, la Familia Comboniana se reunió en Fátima, el 10 de marzo, para iniciar el "tiempo especial" de preparación a la canonización del Beato Daniel Comboni, con una jornada de retiro. Reflexionaron y oraron sobre las líneas fundamentales de la vida y espiritualidad del Fundador.
En Portugal, el Año Comboniano de preparación a la canonización del Beato Daniel Comboni, se prolongará hasta el 15 de marzo de 2004. Tendrá tres momentos fuertes: el lanzamiento de la traducción de los Scritti de Comboni, la Peregrinación de la Familia Comboniana a Fátima el 26 de julio, con la ordenación sacerdotal de tres Combonianos, y el día de la canonización, el 5 de octubre. Además de la peregrinación a Roma, el acontecimiento se señalará con una misa transmitida por TV y radio. Entre tanto, la redacción de las revistas distribuye artículos y fotos sobre Comboni a los medios de comunicación regionales/locales. Los textos han sido preparados por varios hermanos.
A nivel comunidades, en Famalicâo, el Año Comboniano se abrió el 14 de marzo, señalando también el final de la reestructuración de la casa. Las Combonianas y los Combonianos de Lisboa organizaron una ceremonia el 15 de marzo, para los bienhechores, amigos y colaboradores del sur de Portugal. El mismo día, la comunidad de Coimbra preparó un espectáculo musical sobre Comboni. En Maia, la fecha fue recordada en la Misa festiva. Viseu y Santarém aprovecharon la fiesta de los familiares de los seminaristas y de los novicios para la apertura del Año Comboniano.


SUD SUDAN

Tiroteo en la carretera de Narus
El 1 de marzo, viajando por la carretera de Narus (Sudán Sur), hacia Lokichokio (Kenia), el P. Elia Ciapetti y el voluntario laico italiano, Alessandro Codato de Tradate (Varese), fueron interceptados por un grupo de bandidos Toposa, en territorio keniota. Detenido el coche, el P. Elia bajó llevando consigo la bolsa y entregándoles todo lo que tenía. Después volvió a subir al coche que conducía el voluntario laico.
De pronto, uno de los bandidos se puso a disparar contra la puerta, hiriendo a Alessandro en las piernas y al P. Elia en la mano. Después los bandidos se dieron a la fuga, no sin antes de haber golpeado y matado a un soldado de la SPLA que viajaba con ellos y que también había bajado del coche. Alessandro y el P. Elia, como no podían conducir, a causa de las heridas, pidieron la ayuda de un joven inexperto que lentamente y siguiendo sus instrucciones consiguió llevarlos hasta la misión de Lokichokio. Aquí recibieron los primeros socorros y después fueron transportados por un avión de los “Flying Doctors”, a Nairobi. En el hospital fueron operados ambos (la operación duró cerca de tres horas para cada una de las dos heridas) y ahora están todavía recuperándose. El 21 de marzo ambos marcharon a Italia, para seguir curándose.


TOGO-GHANA-BENIN

Conmemoración del P. Jean Pierre Legonou
En una atmósfera espiritual de conmovedora participación, los combonianos, las combonianas y los postulantes presentes en Togo, se encontraron la tarde del 18 de marzo con la familia y la comunidad cristiana de Kodjoviakope, para recordar al P. Jean Pierre Legonou que el Señor había llamado a sí diez días antes, mientras estaba en Sahuayo (Méjico) visitando a los novicios de su delegación del DCA. Jean Pierre había nacido y crecido en aquel barrio que se convertiría en la primera parroquia confiada a los Combonianos que llegaron a Togo en enero de 1964. En contacto con los Combonianos, el joven Jean Pierre había sentido nacer el deseo de entrar en la familia misionera. Había formado parte del primer grupo de postulantes y novicios togoleses y había sido el primer sacerdote Comboniano de la provincia. Estaba llena de fieles la iglesia aquella tarde del 25 de julio de 1992 que lo vio ser ordenado sacerdote por el nuncio apostólico de entonces, en el curso de una celebración, animada por una coral de Abomey (Benin), lugar originario de la familia Legonou.
En la homilía de la conmemoración, el provincial se preguntó qué querría decirnos el Señor con la muerte imprevista de Jean Pierre,a una edad (43 años) en la que todos ponían en él grandes esperanzas. Estábamos orgullosos de que los hermanos de Centroamérica le hubieran escogido su delegado y que hubiera sido llamado, primer africano, a formar parte de la comisión preparatoria del Capítulo General en el año de la canonización del Fundador. La respuesta está en la cruz del Señor, a cuyos pies nace y crece la obra de evangelización. El provincial recordó que Jean Pierre, como ya había dicho el P. Enrico Cordioli en su funeral en Méjico, era "un hombre bueno, con espíritu de niño, corazón de padre y fuerza de un guerrero". La familia, en contra de la tradición ancestral, quiso que Jean Pierre permaneciese con la Familia Comboniana, allí donde el Señor lo había llamado a sí.
En Méjico, Jean Pierre será ciertamente simiente de vocaciones de otros Combonianos "santos y capaces" como lo era él y como el Beato Comboni quiere que sean sus misioneros. En la Eucaristía estaban presentes el padre enfermo, la madre, el hermano gemelo y otros representantes de su familia.
Conmovedor el saludo tradicional a la familia, al término de la celebración: una larga fila de fieles que se extendía desde la casa parroquial a la iglesia, se había formado espontáneamente, para expresarles a ellos y al provincial una solidaridad humana y cristiana por la pérdida de aquel "gigante bueno" que era Jean Pierre.
La provincia del Togo ponía en él grandes esperanzas. Estamos ciertos que desde el cielo no nos olvidará.



IN PACE CHRISTI

P. Aldo Pieragostini (27-07-1927 – 10-02-2003)
El P. Aldo Pieragostini ha marchado a la casa del Padre el lunes, 10 de febrero de 2003, cuando hacía poco había pasado la medianoche del domingo. Se encontraba en el hospital de Lacor (Gulu), donde había sido hospitalizado el 31 de enero, con la esperanza que se recuperase de un estado de debilidad que parecía más persistente que las veces anteriores. Una fiebre constante lo había acompañado en los últimos meses, pero en los últimos días había subido, y los médicos no conseguían llevarla a niveles normales. El P. Aldo pasaba el tiempo rezando, tenía siempre el rosario en la mano. El domingo por la mañana había recibido la unción de enfermos de manos del P. Carlo Pasquali. En las primeras horas de la tarde la situación se había hecho irreversible, la respiración era afanosa y el P. Aldo no conseguía ya hablar. Sin embargo, estaba consciente y respondía con señas a las palabras de consuelo y a las oraciones que se rezaban por él. Hacia las 20.00 perdió conocimiento; después se apagó, asistido por los hermanos del hospital, las religiosas y los enfermeros.
Inmediatamente fue revestido de los ornamentos sagrados. Se le puso la casulla que había usado hacía algunos meses, para la celebración del cincuenta aniversario de sacerdocio y en la que estaba escrito: "God is love, Dios es amor".
Los rasgos distintivos del P. Aldo eran la sencillez y la humildad que le hacían estar atento y disponible al servicio de los demás. Pero más aún: a lo largo de toda su vida y, especialmente, en los últimos años, había vivido la misión en el signo de la debilidad, conclusión de un itinerario personal hecho de ascesis y de aceptación de sus límites, conformado con la cruz gloriosa de Jesús.
El P. Aldo, nacido en Barbara, en las Marcas, el 27 de julio de 1927, había entrado en el Instituto cuando estaba ya cercano al sacerdocio, dejando el seminario diocesano, para seguir la vocación misionera a la que se sentía llamado. Fue ordenado sacerdote, junto a otros treinta Combonianos, el 7 de junio de 1952, por el cardenal Ildefonso Schuster, arzobispo de Milán. Pocos meses después de la ordenación estaba ya en Uganda, donde ha pasado entre los acholi, casi todo el resto de su vida, a excepción de algunos períodos pasados en Italia para recuperarse de enfermedades o situaciones de tensión. En efecto, había vuelto a Italia desde 1959 a 1962, después de nuevo de 1974 a 1975 y, para un período más largo, después de 1990, cuando fue víctima de una emboscada de los rebeldes del LRA (Lord Resistance Army), durante la cual el P. Egidio Biscaro había muerto desangrado sobre sus rodillas.
De aquel acontecimiento, el P. Aldo conservaba viva memoria, además de las señales de una herida en la mandíbula. Algún mes después del atentado había vuelto a Italia y había permanecido cerca de diez años en nuestra comunidad de Lecce, donde había continuado su presencia y su apostolado, caracterizados por la sencillez, la disponibilidad y el testimonio de una vida de fe y de oración. Son testimonio de ello los numerosos amigos con los que mantenía contacto epistolar, para hacerles partícipes de la vida misionera, especialmente de las dificultades en que se encontraba la gente del Norte de Uganda, y también, para comunicar palabras de fe y de esperanza.
El P. Aldo, sencillo pero perspicaz, tenía también una competencia no común en el campo técnico, especialmente en la electricidad y los motores, cosa que le había sido muy útil en las misiones, sobre todo, cuando, junto con el Hno. Federico Bonalumi, había abierto la misión de Padibe.
Era feliz de haber vuelto a Africa. Después del atentado de 1990 había probado varias veces, pero cada vez, al acercarse la hora de la marcha, una sensación de temor lo ponía inquieto y nervioso. Finalmente había conseguido superar sus excitaciones y en octubre de 2000 estaba de nuevo entre nosotros. "Será por un día o por una semana o por un mes o por un año", solía decir. En cambio permaneció durante más de dos años, hasta su muerte. Hace algún mes, cuando las fuerzas comenzaban a declinar y las hospitalizaciones se hacía frecuentes, se preguntaba si sería mejor volver a Italia para exámenes médicos más profundos y mejores cuidados o permanecer en misión. En realidad, en su corazón ya había decidido, pero temía servir de peso. Cuando se sintió acogido así como era, no tuvo más problema. Precisamente al principio de este año, programando las vacaciones, había dicho con decisión: "Iré en mayo del año próximo, en 2004".
Su funeral ha visto la amplia y conmovida participación de tantos hermanos y sacerdotes diocesanos, religiosas y, sobre todo, de tanta gente: una oración de agradecimiento al Señor por el don del P. Aldo a la Iglesia, a la misión, a Africa. La gente ha captado el mensaje de un testimonio hecho de oración y de humilde servicio, administrador de la misericordia del Señor en el sacramento de la reconciliación. El P. Aldo siempre dio todo al Señor y a la misión: su trabajo, su palabra, su benevolencia y, al final, lo que le quedaba, su debilidad y su muerte.
Gracias, P. Aldo por tu presencia, tu amistad y tu testimonio. El Señor te acoja en la alegría de los santos y, desde el cielo, ruega por nosotros.


P. Oliviero Coppari (21-03-1913 – 22-02-2003)
El sábado, 22 de febrero, a las 11,30, un mes antes de cumplir 90 años, expiró el P. Oliviero Coppari. Se había mantenido activo hasta una semana antes. En efecto, aun sintiéndose muy débil, el 16 de febrero había querido concelebrar la que sería su última Misa. Antes de la Misa, se había dirigido al confesionario y había confesado un buen rato. Al final, muy cansado, había subido a su cuarto y no salió más.
El día de su muerte, el P. Cappari se encontraba en casa con el Hno. Silvestro Fadda que lo asistía amorosamente, mientras los demás hermanos estaban fuera para el ministerio de las confesiones. Hacia las 11.20, el P. Alberto Doneda, tuvo un presentimiento, dejó el confesionario y volvió a casa donde encontró al P. Coppari que estaba entrando rápida, pero serenamente en agonía. Tuvo apenas tiempo de administrarle la unción de los enfermos.
El P. Coppari era uno de esos hombres que desde niño se consagran a la Obra de Dios y nunca han vuelto atrás, uno de esos misioneros que, con alma y cuerpo, con los brazos y con la mente, han trabajado en la evangelización, incansablemente y sin dejarse coger por las dudas.
Nacido el 21 de marzo de 1913 en Filottrano, diócesis de Osimo, en la provincia de Ancona, entró jovencísimo en el seminario diocesano, realizó con éxito los estudios y en 1933 decidió ser Misionero, Hijo del Sagrado Corazón de Jesús, para ir a evangelizar los territorios de Africa Central (Sudan y Uganda). Al año siguiente entró en el noviciado, emitió los votos temporáneos el 7 octubre de 1936 y el 16 de abril de 1939 fue ordenado sacerdote.
El mismo año fue destinado a las misiones de Sudán meridional que, en aquel tiempo, eran las más duras y difíciles de toda África, con tribus muy primitivas y, a veces, hostiles, en situaciones climáticas y ambientales pésimas, en medio de enfermedades tropicales como la malaria, la fiebre negra y la fiebre amarilla que han sido la causa de la locura y de la muerte prematura de no pocos misioneros.
El trabajo apostólico partía de las necesidades más elementales y proseguía con la visita a las capillas, la formación de comunidades y de guías cristianos, la construcción de escuelas, el catecumenado con el internado. En la misión del Bar-el Gebel, donde trabajó desde 1939 a 1948, el P. Coppari conoció y trabajó con el P. Angelo Barbisotti, futuro primer obispo de Esmeraldas.
Del 1949 al 1960 trabajó en Italia, en particular en la administración de las escuelas apostólicas (seminarios menores) hasta que, en 1960, por invitación de Mons. Barbisotti, fue destinado al Ecuador donde permaneció cuarenta y tres años, recorriendo varias misiones y parroquias: Muisne, S. José Obrero, Catedral Cristo Rey, La Merced.
Oficialmente nunca ha sido párroco, aunque a veces ha permanecido solo en la parroquia por muchos años. En Muisne, precisamente mientras estaba solo, cayó del techo y fue dado por muerto, muerte anunciada incluso en los periódicos. Sin embargo, se recuperó rápidamente y volvió a su trabajo.
El P. Coppari ha sido un sacerdote santo, fiel a la Regla de Vida, serio y honesto, estudioso y lector apasionado, buen conversador y predicador - aunque no fue fácil para él aprender español - amigo y confidente de muchos. Era emprendedor, activo, animoso, sin temores ni vacilaciones, cuando era necesario. Fue también un buen administrador. Le gustaba mucho el trabajo manual: siempre estaba construyendo alguna cosa: un banco, un armario, puertas y mil otras cosas. Experto carpintero, albañil, electricista e incluso enfermero. Cultivaba el jardín y, de las plantas y de las flores sacaba perfumes. En Navidad se dedicaba con pasión y genialidad a la construcción del nacimiento. En Africa era famoso como cazador de grandes animales que servían de alimento para todos los catecúmenos internos y para los alumnos de las escuelas. En Ecuador, con su carabina se divertía matando los murciélagos que invadían la iglesia.
Su característica más evidente fue la devoción a la Virgen de la Casa de Loreto y, efectivamente, le gustaba celebrar con particular suntuosidad las fiestas de la Virgen. Fue encargado de la asistencia espiritual de la Legión de María de Esmeraldas. También fue particular devoto de S. José, artesano y trabajador, quizás, precisamente a causa de su pasión por el trabajo manual.
Además, sobre todo en la parroquia de La Merced, se dedicaba en particular, al ministerio de la confesión y esta fue la característica de sus últimos años. Su confesionario era el más frecuentado por los fieles, los sacerdotes, religiosos y religiosas de toda la provincia. Estaba siempre disponible y lo ha estado hasta los últimos días de su vida.
La presencia de los fieles en la vigilia fúnebre -que duró un día y una noche enteros- y en el funeral han sido compacta y conmovedora. Algunos decían: "El P. Coppari conoce toda mi vida y mis pecados, ciertamente hablará a Dios de mis dificultades y me ayudará".
Durante la homilía fúnebre, el obispo resaltó particularmente la vida sacerdotal del P. Coppari, presentándolo como ejemplo a los más de treinta sacerdotes presentes y a los fieles.
La misa y el funeral se desarrollaron el domingo, 23 de febrero, a las 16.00, en la iglesia de La Merced. (P. Alberto Doneda).


P. Jean-Pierre Legonou (22-02-1960 – 08-03-2003)
El P. Jean-Pierre había nacido en Benin, de una familia profundamente cristiana. El padre, maestro, y la madre, empleada en correos, frecuentaban la parroquia con asiduidad y tomaban parte en la vida pastoral de la comunidad eclesial.
La familia Legonou, el 22 de febrero de 1960, fue alegrada con un gran acontecimiento: el nacimiento de dos hermosísimos gemelos. El padre, Anselmo, hombre de fe y de Iglesia, se acordó que aquel día se celebraba la fiesta de la Cátedra de S. Pedro y quiso dar a sus hijos los nombres de Jean-Pierre y Jean-Paul, en honor de los dos santos apóstoles.
Durante la infancia de los gemelos la familia se trasladó a Togo, la nación colindante, donde el pequeño Jean-Pierre asistió a las escuelas elementales y las clases sucesivas.
Un acontecimiento que señaló mucho su vida cristiana fue el pertenecer a la Legión de María, movimiento en el que maduró su vocación cristiana y misionera. Con frecuencia hablaba con gusto de los años transcurridos en este movimiento mariano y se notaba todo el afecto que nutría por los numerosos amigos que había tenido en aquel período.
Hacia finales del liceo conoció en Togo a los Misioneros Combonianos. Quedó fascinado y entusiasmado y decidió emprender un camino que lo llevó a ser el primer Comboniano Togolés de Africa Occidental. En los años sucesivos repetirá con frecuencia: "Si no me hubiese hecho misionero, me hubiera enrolado como piloto de cazabombarderos". Cuántas veces hemos bromeado juntos sobre esta frase famosa.
Los años de la formación se pasaron rápidos: postulantado en Lomé, noviciado en Congo y escolasticado en Roma. Esta última etapa representó para Jean-Pierre un momento muy significativo de su crecimiento espiritual, cultural y humano.
Muchas veces recordábamos con nostalgia los años pasados juntos en aquel escolasticado: éramos mucho más jóvenes y habíamos tenido los mismos formadores y los mismos profesores.
Desde entonces se notaba que el Señor había dado a Jean-Pierre muchos dones y talentos, por lo que se le aconsejó que siguiera los estudios y se especializara en derecho canónico, cosa que realizó en la Pontificia Universidad Gregoriana, terminando los estudios brillantemente.
Fue ordenado sacerdote en Togo, el 25 de julio de 1992, en su parroquia, en presencia de un grupo de amigos venidos de la parroquia de S. Vigilio de Roma. Estos lo amaban mucho y siempre han sido sus amigos inseparables.
Terminados los estudios romanos, había sido destinado a Centroamérica: era el primer africano comboniano que llegaba a aquella delegación.
Pronto aprendió la lengua y consiguió el carnet de conducir. El automóvil será su fiel compañero en los largos viajes apostólicos. Destinado a la promoción vocacional, se distinguió por la seriedad, el compromiso y la dedicación a un encargo tan delicado.
Muy pronto nos dimos cuenta de que, además de las dotes culturales, tenía dotes de autoridad y se consideró oportuno presentarlo al Consejo General como delegado de Centroamérica, cosa que fue aceptada y renovada. Se trató de un paso profético en América Latina y todos hemos quedado contentos. El P. Jean-Pierre ha desarrollado el servicio con generosidad y entusiasmo, sin ahorrarse fatigas y energía, con la autoridad de un padre y la ternura de una madre.
Amaba la vida en todos sus aspectos y vivía con alegría cada día, a pesar de los innumerables problemas de la delegación. Son famosas sus carcajadas que todos hemos conocido. Amó la Iglesia, al Papa y al Instituto con un servicio y un espíritu misionero generoso. La muerte lo ha sorprendido por la espalda, de improviso, mientras tenía el retiro a los jóvenes novicios de Sahuayo, en Méjico.
A nosotros nos queda el ejemplo de un joven misionero que ha vivido una vida breve, pero intensa, sirviendo a Dios y al pueblo centroamericano. Hasta la vista Jean-Pierre y, como se dice en Togo, "que la tierra que te cubre sea para ti ligera" (P. Enrico Cordioli).


P. Enzo Canonici (30-06-1931 – 09-03-2003)
Los hermanos de su comunidad de Brescia, con afecto, lo llamaban "maestro". Y fue maestro. El P. Enzo fue maestro, porque nos ha dejado muchas enseñanzas y testimonios de vida comboniana, Fue maestro de espiritualidad y misionariedad, de bondad y comprensión, de humildad y de oración. Fue maestro de obediencia, aquella obediencia humilde y, al mismo tiempo, inteligente y creativa. Fue precisamente aquel espíritu de obediencia visto en él, el que llevó a los superiores a pedirle una diversidad de servicios. El P. Enzo aceptó todo tipo de encargos y los llevó a término con empeño.
Fue padre espiritual y formador en Italia, España y Méjico. Formaba con su testimonio, mientras que su autenticidad le dio siempre autoridad.
Fue pastor. El período que recordaba con más alegría y nostalgia fueron los años transcurridos en la pastoral en la Baja California y en Netzahualcoyotl, en el centro de Méjico. Como Buen Pastor amó a su pueblo y el pueblo lo amó a él. En la pastoral daba prioridad a la formación de los líderes, a un catecumenado serio y profundo y a los grupos de reflexión bíblica. "La palabra- dice en sus escritos - es vida; la palabra cambia el corazón y las mentalidades; la palabra cristifica los corazones más endurecidos. La palabra cambia el agua en vino de cualidad".
Quizás el testimonio más significativo para nosotros es el de él como Comboniano. Se sentía orgulloso de ser Comboniano y, como tal, tenía cuatro amores: Comboni, la misión, el Instituto y los hermanos.
Amaba la misión, no sólo como lugar geográfico, sino sobre todo como "privilegio que había recibido de Cristo, Evangelizador del Padre". Amaba la misión con la típica disponibilidad de la Virgen María de servir a Dios en todo y siempre. En sus apuntes se lee con frecuencia su frase preferida: "Totus tuus sum et omnia mea tua sunt".
También durante su servicio como superior de la Curia, en la casa generalicia (1989-1995), servicio que consideró siempre como cruz muy pesada, su sueño fue volver a la misión. En 1998 finalmente el P. Enzo recibió esta obediencia gozosa que todo Comboniano espera: volver a la misión. Una crisis cardíaca apagaba de nuevo sus sueños, pero no la esperanza. En 1999 fue destinado definitivamente a la provincia italiana. Escribió: "Obedezco a la obediencia. ¡Fiat, fiat!. Pocos meses antes de morir pidió poder volver a la misión. Su deseo continuaba siendo poder morir en el campo de batalla, como un buen soldado. Pero los planes de Dios eran diversos. El corazón volvió a hacer bromas pesadas y el P. Enzo aceptó todo como una señal de la voluntad de Dios. Entonces, se empeñó con todas sus fuerzas en continuar su programa misionero en Italia: transforma su enfermedad en apostolado.
Como instrumento, además de la Biblia, usó el libro que había escrito para los enfermos: "Dolor que salva". Un libro que fue amado especialmente por los enfermos y los ancianos y que alcanzó la quinta edición. El P. Enzo permaneció fiel a este apostolado hasta el final: la muerte no lo sorprendió, porque la esperaba hacía tiempo: "Cada día - solía decir - puede ser el día hermoso del encuentro con el Padre". El encuentro llegó en Milán, el 9 de marzo. El P. Enzo tenía 72 años de edad y 48 de sacerdocio. Había nacido el 30 de junio de 1931 y había sido ordenado sacerdote el 26 de junio de 1955.
Al P. Enzo le gustaban mucho las flores. Pero las flores más bellas las hemos contemplado en el jardín de su testimonio de vida. Sin duda las flores de su sencillez y humildad eran las más abundantes. Era humilde, con aquella humildad mariana que le había ayudado a transformarse en disponibilidad y servicio a Dios y a los hermanos. Añadió una bienaventuranza a las proclamadas por Jesús: "Bienaventurados los inútiles, porque son necesarios. Dios realiza maravillas a través de la humildad de sus siervos". Es la bienaventuranza que cita en varias ocasiones en sus cartas.
Y con la humildad, la flor de la oración. Con su oración fiel, constante y prolongada testimoniaba y llamaba a los hermanos a la importancia de nutrirse de aquel pan cotidiano que Comboni había propuesto a sus misioneros.
Querido P. Enzo, te damos gracias por la bondad que has sembrado en nuestros corazones. Dios está contento de ti. ¡Y también nosotros!" (P. Teresino Serra).


P. Antonio Dutto (14-02-1926 – 20-03-2003)
El P. Antonio Dutto nació en Boves, ayuntamiento de Cuneo, el 14 de febrero de 1926. Fue ordenado sacerdote en 1951 y en diciembre de 1952 marchó a Londres, a prepararse para ir a Gulu, en Uganda Norte. De 1952 a 1956 fue profesor en el Seminario de Lacor. Después pasó a la pastoral en las siguientes misiones: Anaka (1957-1958), Aduku (1958-1965), Opit (1965-1968), Padibe (1968-1975), Pajule (1975-1976), Namukora (1976-1978), Kalongo por Namukora (1978-1982), Awach (1982-1984), Kitgum (1984-1986), Parombo (1987-1990), Kalongo (1990-1994).
De esta lista de sus cambios, incluso de una diócesis a otra, parecería que el P. Antonio no tuviese un carácter muy fácil para vivir con él. Tenía un temperamento fuerte, sincero, fácilmente irritable y con frecuencia crítico. Lo revela, por ejemplo, una carta que escribió al provincial de Uganda en 1981: "Estoy medio muerto de cansancio, todo me fastidia y me hace saltar, no me siento con fuerzas para ir a un puesto difícil y tomar responsabilidades. Además está la cuestión de la comunidad alargada que yo no la veo. No me forcéis a volverme loco. Al menos por un poco de tiempo tengo necesidad de tranquilidad, si no tendré que ir a Italia. Digo esto porque en conciencia siento que tengo necesidad de un poco de libertad de preocupaciones". El P. Antonio tenía ciertamente sus límites, pero también una gran pasión por la misión y por Uganda en particular.
En 1994 sufrió un asalto de parte de los rebeldes del Kony. Resultó herido en una pierna que después se le debió amputar. En Verona, donde estaba hospitalizado, intentaba hacer ejercicios para poder volver a caminar. Con frecuencia, especialmente en los últimos años, estaba en un carrillo, pero la esperanza de volver a la misión estaba siempre viva en él. Por las cartas que escribía desde Verona al provincial de Uganda, se nota, como un estribillo, su gran deseo de volver a Uganda.
No conseguía resignarse a haber sido trasladado a la provincia Italiana. En 1994, apenas se rehizo un poco de la pierna, ya escribía: "Mi pensamiento está siempre en Uganda. Vuelvo a ver los lugares y las personas y recuerdo a todos en la oración". En 1995 escribía: "Aquí me han propuesto trasladarme a la provincia Italiana. He propuesto esperar y ver cómo me las arreglo. Espero que también Mons. Comboni me haga un regalo por su beatificación". Leía con gusto las noticias que venían de Uganda: "Gracias por el Dialogo y la Voce del Consiglio Provinciale: me traen siempre un poco de aire de Uganda y me hacen bien. Tengo alguna conversación con los hermanos de paso y estoy siempre en espera de noticias de Uganda. Cuando llegan es fiesta". En 1996 escribía: "Saber que tengo esperanza de volver a Uganda me ha dado valor y buena voluntad para esforzarme más". En 1997 escribía al provincial de Uganda y le explicaba que empezaba a caminar bastante bien y que, por tanto, esperaba volver a Uganda. "Yo camino bastante, aunque como un pobre viejo. Empiezo a pensar en volver a Uganda. ¿Tú qué piensas? Aunque estás para dejar las riendas". A su sucesor, que fue a visitarlo a Verona en el 2000, dijo: "Quiero que me conozcas, para que puedas aceptarme en Uganda".
El P. Antonio nos ha dejado el 20 de marzo de 2003, después de un penoso tiempo de hospitalización que fue su calvario. Su pasión por la misión y por Uganda en particular, era un fuego que purificaba en él sus límites de carácter. Esta su pasión por la misión es un hermoso ejemplo para todos. (P. Guido Oliana)


P. Vincenzo Cioffi (13-11-1933 – 15-03-2003)
Su necrología aparecerá en el próximo número de Familia Comboniana.


Oremos por nuestros difuntos

LA MADRE: del P. Tesfamichael Debesay Negasse (Roma); del P. Claudino Ferreira Gomes (CN); Beatrice del P. Marcello Trotta (I); Maria del P. Ottavio Raimondo (I)

EL HERMANO: Samuel Njoroge del P. John Ikundu (TCH)

LA HERMANA: Anna del P. Arcangelo Petri (U);
Rose del P. Vincent Maguire (U)

LE RELIGIOSAS MISIONERAS COMBONIANAS: Hnas. Celerina Scolari;
Armanda Testoni; M. Castilia Moioli.
Familia Comboniana n. 597