Último de doce hijos el P. Giovanni Battista Zanardi nació en Brembilla, Bergamo, el 26 de septiembre de 1920. En el otoño del año 1931 empezó la secundaria en el seminario diocesano. En septiembre de 1942 entró en el noviciado comboniano de Venegono Superiore, Varese, y el 26 de junio de 1946 fue ordenado sacerdote.
El P. Giovanni Battista pidió a los superiores salir de inmediato para la misión y fue escuchado. En 1948 llegó a la misión de Mboro, en Sudán. Enseguida se zambulló en el estudio de la lengua y en el trabajo, con grande entusiasmo, preparando para el bautismo a grupos de chicos, cada vez más numerosos. Visitó todos los poblados, parándose a hablar con la gente, especialmente con los ancianos, que daban muestras de agradecer la conversación de aquel joven sacerdote, cordial y siempre contento, que había aprendido muy bien su lengua y conocía sus costumbres. El P. Giovanni Battista se orientó sobre todo a la formación de los catequistas, en quienes veía los ayudantes indispensables del misionero. Además de por los ancianos, mostraba una atención particular por los enfermos, sobre todo por los enfermos de lepra que en la zona eran muy numerosos.
Después de cinco años de ministerio misionero en Mboro y seis meses en Jartún para estudiar el árabe, en 1954 fue enviado, por cuatro años, a la misión de Raga, de mayoría árabe. Al regresar a Italia fue enviado a Thiene como superior local y luego a Brescia como ecónomo provincial.
En 1962 fue enviado nuevamente a misiones, destinado esta vez a Uganda, y trabajó en la misión de Aliwang y Alanyi, en la diócesis de Lira, y después en Kampala. En 1967 regresó a Italia y, después de un breve periodo en Milán, fue a Asti como superior local, durante seis años.
En 1974 nuevamente regresó a la misión destinado a Uganda, a Aber, donde permaneció solamente un año porque lo necesitaban en Kenia en la congregación de los Apóstoles de Jesús, que estaba en fase de expansión, y tenían que construir el seminario. El P. Giovanni Marengoni necesitaba un administrador capaz y el P. Giovanni Battista hizo el trabajo muy bien desde 1975 al 1977. De 1977 a 1986 fue a Roma como procurador. En 1986 fue enviado a Inglaterra como administrador. De 1990 hasta 1995 estuvo en Italia, en Roma y en Brescia.
En 1995 regresó nuevamente a Kenia por dos años trabajando como administrador para Sudán del Sur. En 1997 fue destinado a Brescia, pero poco después volvió a Kenia como encargado de las finanzas de Sudán del Sur, administrando sobre todo la diócesis de Rumbek, en Sudán del Sur, donde era obispo Monseñor Cesare Mazzolari. “El obispo no tiene palacio episcopal, no tiene catedral, porque todo fue bombardeado. Vive en una cabaña, tal como puede. Puedo desarrollar mi trabajo desde Nairobi en Kenia, porque en Rumbek no hay ni siquiera luz eléctrica, no hay bancos, ni oficinas, ni estaciones de servicio”, decía el P. Giovanni Battista en una entrevista. De esta vez permaneció en Kenia cuatro años. Al regresar a Italia en el año 2003 fue enviado a Brescia para ejercer el ministerio durante seis años. En 2010 fue a la casa de enfermos de Milán donde murió el dieciocho de marzo del 2013. Sus restos mortales recibieron sepultura en el cementerio de su país natal, Brembilla de Bérgamo.