Martes, 22 de octubre 2024
Compartimos la experiencia de nuestra alegría misionera desde el Postulantado mártires de Uganda, en Costa Rica. Como cada año, el pasado 20 de octubre, invitamos a todos nuestros conocidos “Amigos de la Misión” a celebrar juntos la Jornada Mundial de las Misiones. Hemos querido poner en práctica, las palabras del Evangelio de Mateo (22,14), las mismas que nos ha recordado el Papa Francisco con motivo de la Jornada mundial de las misiones: “Vayan e inviten a todos al banquete”.

Desde temprano se fueron acercando al banquete festivo, rostros muy conocidos y queridos por nosotros, los misioneros. Algunos han permanecido vinculados a los Misioneros Combonianos desde los inicios de nuestra llegada a Costa Rica, en 1979. Los consideramos como “columnas” al sentirlos de gran ayuda en nuestra tarea de animación misionera.

Juntos hemos gozado una vez más de este ambiente misionero, en este día tan señalado. Iniciamos con la oración, preparada por nuestros postulantes. Luego, un momento muy especial fue cuando el diácono comboniano Mynor Chávez, guatemalteco, compartió su testimonio vocacional misionero. A continuación, tuvimos un café compartido, acompañado por sabrosos panecillos y demás que cada uno trajeron de sus casas. Después del café, comenzamos con el momento más importante del encuentro: la Santa Eucaristía, presidida por el padre Ignacio Marín Artavia. También él remarcó su experiencia misionera.

Después del Sagrado Banquete tuvimos el almuerzo compartido. Preparado con mucho amor por el grupo Santa Marta, de la parroquia Sagrada Familia, el mismo barrio donde se encuentra el Postulantado desde hace más de 40 años.

El total de los allegados fueron unos 225 invitados participantes. También nos encontramos con nuevas caras, y eso es especial. A la tarde, llegó nuestro momento de esparcimiento con juego del bingo. Algo asombroso fue el ver tantos regalos que la gente trajo o envió para repartir durante el juego del bingo. Es por eso que casi todos marcharon con algún premio. Los pocos que no llevaron premio, fueron también envueltos por la alegría de todos los demás.

Gracias a Dios, pasamos, el DOMUND con un buen tiempo, ya que dos días antes pasó por el sector del seminario un tornado, y desde el sábado, mucha lluvia. El Señor, nos regaló un día de los buenos. Finalizamos la Jornada con una oración, en convivencia y compartiendo en fraternidad el Banquete misionero al cual Jesús nos sigue invitando y que de nuestra parte estamos llamados a invitar a otros. Se aprovechó el evento para mostrar una exposición en banners, con motivo de los 30 años de los misioneros combonianos en la casa del CAM, Costa Rica, celebrado el 18 de agosto pasado.