Padre Jaume Calvera Pi: “La animación misionera comboniana en la Europa de hoy”

¿Por qué es importante en Europa que los Misioneros Combonianos
 trabajen en la Animación Misionera?

La Animación Misionera de nuestra congregación en Europa, ha pasado a lo largo de la historia, por diversas fases de entendimiento, de acción y de interpretación. Dado que la Animación Misionera se inició en Europa, ya desde los tiempos de nuestro fundador, parecía que en principio solo era practicable y aplicable en contextos europeos. Pronto cayó esta imagen con la apertura y expansión de la congregación a otros continentes, sintiendo la necesidad de hacer Animación Misionera en otros lugares.

En Europa, la Animación Misionera, ha pasado por diferentes fases, pero los misioneros combonianos han estado atentos a lo que la sociedad y la Iglesia vivían en cada momento. Ha sido un proceso doloroso, en el que en algunos momentos se ha arriesgado la posibilidad de desaparecer, pero al ser un elemento muy arraigado en nuestra tradición comboniana y en nuestro carisma, se ha podido mantener. Por eso que a pesar de las diferentes contextualizaciones en Europa, no ha dejado nunca de existir con más o menos eficacia y resultados.

Según define Roberto Calvo, en el libro de reciente publicación: La Pastoral Misionera, editado por Mundo Negro, Madrid, 2022, “la animación misionera es una acción pastoral, realizada en el seno de las diversas comunidades eclesiales para que se hagan realmente misioneras las personas, las instituciones y las comunidades en cuanto tales”. Por eso esta acción pastoral tiene hoy su total vigencia y necesidad de ser implementada para que la Iglesia mantenga vivo su compromiso de anunciar a Cristo por todo el mundo.

En la Europa de hoy, que se encuentra en un ya avanzado proceso de secularización, no nos debe ni alarmar ni preocupar que los misioneros combonianos tengan un importante papel evangelizador en sus comunidades por medio de una Animación Misionera, en clave de anuncio liberador del Cristo muerto y resucitado, por medio de la inserción en las redes sociales, parroquias, grupos y comunidades donde la Animación Misionera sea un ministerio reconocido dentro de la Iglesia, como elemento evangelizador.

Nuestra Animación Misionera en Europa se concreta, en dos formas diferentes: por medio de una presencia catequética en la predicación y el anuncio, y por otro lado utilizando nuestros medios de comunicación social tan típicamente combonianos como revistas, redes sociales, editoriales de libros, museos, exposiciones, etc. Cada iglesia local tendrá su propia historia y prioridad pastoral, pero la dimensión misionera, nunca podrá faltar y los misioneros combonianos, deberemos estar allí para llenar este espacio pastoral, que nos viene regalado por nuestra propia vocación y carisma misionero.

Otra cuestión será concretar todo este caudal de propuestas, por medio de nuestros simples medios de comunicación, revistas, editoriales de libros, todo ello al servicio de una evangelización integrada en la vida de cada Iglesia local. Un trabajo importante será desarrollar a nivel de iglesias locales el ministerio de la animación misionera. En el libro anteriormente citado se dice: “Dada la importancia de la tarea, por ello mismo es imprescindible el ministerio del animador misionero, en cuanto que es portador de un carisma, de un don del Espíritu, que debe poner al servicio de la Iglesia en orden a su edificación de cara a la misión. Por ello, cada comunidad necesita crear e instituir a alguno/s en este ministerio en cuanto servicio de y para toda la comunidad eclesial”. En una Iglesia que camina hacia una sinodalidad efectiva y afectiva no podremos sustraernos de potenciar, iluminar y dar contenidos al ministerio de la Animación Misionera, que bien merecerá de cara al futuro una mayor reflexión y puesta a punto en la vida de la Iglesia.

Una primera reflexión y de cara al próximo Capitulo General, nos lleva a un análisis serio sobre qué tipo de animación misionera debemos realizar. Pero lo más urgente será destinar y siempre en vista al próximo Capítulo, más personal en Europa para esta tarea evangelizadora, por medio de nuestro carisma comboniano de la Animación Misionera.

Quizá nos quedamos demasiado en un análisis de una Animación Misionera generalizada y conceptual. No podremos olvidar que la realidad y la práctica de este ministerio pasa por actividades tan recurrentes como escribir un artículo en una revista o en una web, hacer nuevas suscripciones para nuestras revistas, vender libros de nuestras editoriales, dar una catequesis misionera a un grupo de niños o jóvenes, organizar una exposición temporal misionera en un espacio público, etc. Todos ellos son auténticos retos para una Animación Misionera actualizada, a la luz del Espíritu, en la Europa de hoy.

P. Jaume Calvera Pi
[combonimission.net]